El Consell realizará obras en el punto negro de Son Ferriol
Sergio Jimenez | 26/10/2022
El Consell de Mallorca ha indicado que realizará obras en el punto negro de la carretera Ma-30, que va de Alcampo hasta Mercapalma, cerca de Son Ferriol, frente a los depósitos CLH.
Según ha indicado la institución insular, el objetivo es reducir los accidentes que se han registrado en los últimos años.
En concreto, este punto se ha cobrado la vida de cinco personas en los últimos dos años. De hecho, el pasado 17 de septiembre, tres jóvenes murieron en la citada vía.
“Todavía tenemos accidentes importantes en esta carretera”, advierte el conseller de Movilidad, Iván Sevillano, a IB3 Televisión.
Asegura que hace unos días convocó a los técnicos para que comiencen a estudiar y planificar qué actuaciones se pueden realizar en este tramo y, de este modo, resolver los problemas de accidentalidad.
Desde Crónica Balear hemos ido a comprobar y hemos hablado con numerosos testigos para tratar de esclarecer qué ocurre en este punto de la carretera.
Nueve de cada diez personas que viven cerca de la zona manifiestan que la vía "no está bien". En los propios comentarios de la publicación sobre el último accidente en el que tres jóvenes fallecieron, los lectores indican las múltiples problemáticas de la carretera.
Lo que ocurre en un punto crítico es una suma de irregularidades. En primer lugar, la carretera, cuando se pasa por debajo de la rotonda de Manacor, es una vía a 100 kilómetros por hora, por lo que la gente va rápido.
A pocos metros del lugar del accidente hay una señal que indica que hay que reducir a 80 kilómetros por hora, pero está situada en un lugar algo alejado y con poca visibilidad, por lo que es fácil no verla y sí lo es despistarse.
Además, hay una suma de obstáculos que, a tal velocidad, son muy peligrosos: los coches, al salir de la recta, tienen un cambio de rasante y un bache que provoca saltos en los coches. Al salir del bache, la vía hace una "S", pasa de dos a un carril y, además, hay una incorporación que viene de la derecha.
Según hemos podido comprobar, al venir de una recta y hacer esta pequeña "S", la mayoría de los coches siguen recto y llegan a pisar la incorporación.
Son muchos los puntos que son peligrosos y aun así 80 kilómetros por hora es una velocidad bastante elevada.
En el sentido contrario, hacia Alcampo, hay una señal de velocidad máxima a 60 kilómetros por hora, no hay cambio de rasante y no hay bache, la carretera sigue recta y cambia de un carril a dos. Lo opuesto.
La mayoría de los accidentes suelen ser por exceso de velocidad, pero que, sumada a todas estas irregularidades, provocan accidentes muy graves.
La gran mayoría de las personas con las que Crónica Balear ha hablado dice que ha tenido "sustos" y es muy "fácil tener una desgracia si no se conoce la carretera", no se explican cómo se ha podido hacer una carretera tan llena de dificultades.
Por si esto no fuera poco, se trata de una vía con muy poca iluminación, sin farolas, lo que dificulta mucho su circulación cuando es de noche.