Un asaltante de la casa de Pau Rigo: "Antes del disparo en ningún momento le agredí"

"No le doy la culpa a este hombre, no le tengo rencor, no es un asesino, pero la persona que más quería en el mundo era a mi hermano", ha afirmado Fredy Escobar sobre la muerte de su hermano Mauricio durante el robo en la casa de Pau Rigo, el anciano que mató de un disparo con la escopeta a uno de los ladrones.

Este acusado de asaltar la finca rústica de Pau, que se enfrenta a una petición de seis años de cárcel, ha afirmado que antes de escuchar el disparo que acabó con la vida de su hermano "en ningún momento" agredió al anciano.

"Estaba muy nervioso. No vengo a decir que sea un asesino, solo vengo a contar lo que pasó. No fui a su casa a golpearlo o a hacerle daño. Yo solo quería irme", ha relatado Fredy.

Así lo ha contado en el interrogatorio en el juicio con jurado que acoge la Audiencia de Palma por estos hechos, que se remontan a febrero de 2018, cuando los hermanos Escobar, junto a otros dos hombres que les esperaban en el exterior de la finca, perpetraron el robo en la finca rústica de Porreres del anciano, por aquel entonces de 77 años.

"Estoy pagando por mi error. El no quería que ocurriera lo que pasó. Yo fui el provocador de todo esto y estoy segurísimo de que si yo no hubiera golpeado a Pau, yo seguramente no estaría aquí sentado y mi hermano no estaría donde está", ha declarado el hombre.

Los hermanos se pusieron el pasamontañas y asaltaron al anciano, a quien obligaron a abrir la caja fuerte. Mientras se hacían con un botín de 15.000 euros, Rigo cogió una escopeta que escondía cargada tras una puerta y, cuando los ladrones salían de la vivienda, disparó en el abdomen a uno de ellos, que finalmente falleció.

Fredy, el otro asaltante, le arrebató el arma a golpes, cargó a su hermano herido y salió de la finca, como ha recordado en su declaración. Ha insistido en que el anciano les sorprendió. "Pensé que cargaba la escopeta y empezó un forcejeo, por eso me dirigí hacia él", ha comentado.

En el banquillo de los acusados también se sientan Jose Antonio Sánchez y Marcos Rotger, los otros dos ladrones que participaron en la planificación del robo, para quienes la Fiscalía pide condenas de cinco años de prisión. Permanecen en prisión tras ser condenados por el robo con violencia que cometieron en casa del anciano en diciembre de 2017.

Por su parte, la acusación que representa a la familia del ladrón fallecido pedía inicialmente 15 años de cárcel para el anciano, si bien rebajó su petición a 10 años en el primer juicio.