Nuevas peleas en Cala Major desatan la indignación de los vecinos

Continúan las peleas y los altercados en Cala Major. Si en la madrugada de este pasado sábado varios vecinos denunciaban la presencia de numerosos jóvenes haciendo botellón, zarandeando coches y tirando motos, una nueva pelea se sumó anoche a los episodios vandálicos que sufre la zona los fines de semana.

"La situación ya es insostenible, es la incógnita con la que te vas a la cama cada día, preguntándote a ver qué va a pasar esta noche", lamenta un lector de Crónica Balear, quien asevera que "hay noches en que, ya viendo el jaleo, te quedas delante del ordenador o mirando una peli y, para cuando baje el ruido, intentar ir a dormir. Los viernes, sobre todo, son una locura".

Anoche, asegura, "sucedió un poco lo de siempre". "Sobre las 00.10, desde casa empezamos a oír jaleo. En principio no le hicimos mucho caso porque los fines de semana hay bastante griterío, pero vimos que por el tono había una pelea", relata el vecino, visiblemente afectado. Según cuenta, en a varios metros de la conocida discoteca Rockefeller, delante de un bar, se estaba produciendo un altercado entre dos personas, "una de las cuales acabó cayendo al suelo. Aunque no estaba inconsciente, por lo visto la otra le había pegado fuerte".

Según narra, otras personas intentaron apartar varios metros al presunto agresor, quien de forma continua intentaba volver a aproximarse a la víctima. "Intentaba acercarse, lo volvían a alejar, se quitó incluso la ropa de arriba porque con el forcejeo intentaba liberarse, hasta que intentó agredir a los otros y a pelearse en medio de la calle".

El testigo señala cómo, finalmente, se llevaron al hombre hasta el parking municipal, hasta donde se desplazaron varias patrullas de la Policía "para detenerlo mientras una ambulancia se llevaba al herido que se encontraba en el suelo".

El vecino se lamenta de que "últimamente se ven por la zona grupos de chavales que no parece ni que tengan 18 años. Son muy jóvenes y no muestran ningún tipo de respeto, y si les dices que, por favor, se callen, acaban insultándote".

"En la parte del parking público por las noches es una fiesta y donde está la discoteca se junta aún más gente. Cruzan por medio de la calle, paran a los coches... No ocurren más desgracias porque la gente que pasa va con cuidado", asevera.

Respecto a la actuación policial, señala que "es verdad que suelo llamar cuando pasan estas cosas y anoche en poco tiempo vinieron, pero tiene que ocurrir una agresión, pero si hay botellón actúan cuando tienen alguna patrulla disponible. A veces puedes estar dos horas y te dicen que todos los agentes están ocupados".

Por todo ello, confía en que el Ayuntamiento de Palma "ponga cartas en el asunto" ya que, además, la zona "está totalmente abandonada". "En el parking ve incluso a la gente tirar escombros. A veces se juntan varias personas para limpiar el bosque porque los que hacen botellón tiran ahí las botellas. No no solo es el ruido, es la basura y el incivismo que muestran", recrimina.

"Y lo que más rabia te da es que no es gente del barrio, porque si fuese una zona conflictiva podría entenderlo, pero la gente del barrio es sensacional y es una lástima que suceda esto. Te rompen la armonía", concluye.