Familiares del preso fallecido en la prisión de Palma reclaman que se investigue su muerte

Una decena de amigos y familiares de un preso fallecido este verano en la prisión de Palma han protestado este martes frente al Parlament para que se investiguen las circunstancias de su fallecimiento.

Un familiar de la víctima ha explicado que el hombre falleció en la prisión el pasado mes de agosto después de haber sufrido amenazas por parte de un funcionario del centro penitenciario y haber pedido el traslado "al temer por su vida".

Según el relato del familiar, el hombre fue hallado sin vida y un primer informe aseguraba que la muerte se debía a una sobredosis y que fue encontrado "con una jeringuilla en el brazo".

Sin embargo, los familiares se encontraron con el cuerpo del hombre plagado de golpes. Además, según han asegurado, la forense les dijo que "se había ido de vacaciones y que ella no había hecho el informe".

Los familiares reclaman ahora que se investiguen las circunstancias de la muerte. Según ha añadido, están ahora a la espera de una segunda autopsia para poder enterrarlo.

"MI HERMANO NO HA MUERTO EN LA CÁRCEL DE PALMA. A MI HERMANO LO HAN MATADO ALLÍ DENTRO"

Tal y como informó Crónica Balear, la familia denunció a la Policía Nacional las extrañas circunstancias en las que apareció muerto Francisco Belmonte, de 52 años de edad, interno en el centro penitenciario desde hacía tres años y bajo una condena de doce.

Según indica la autopsia, a la que la familia no ha podido acceder hasta mediados de septiembre, la muerte fue accidental y por reacción a sustancias estupefacientes; aunque los familiares defienden que no se describen los numerosos golpes, heridas y contusiones que advirtieron en el cadáver cuando lograron verle en el tanatorio.

La familia clama justicia y asegura tener pruebas de que su hermano no murió accidentalmente.