Libertad para el propietario del Medusa Beach detenido por el derrumbe mortal
El Juez le ha retirado el pasaporte, le ha impuesto comparecencias periódicas y la prohibición de salida del país
Redacción | 26/06/2024
El titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Palma en funciones de guardia ha dejado en libertad al propietario del Medusa Beach Club.
El empresario que explotaba el bar de la Playa de Palma donde el pasado 23 de mayo murieron 4 personas tras derrumbarse la terraza superior, ha sido puesto en libertad después de ser acompañado esta tarde por la Policía Nacional a los juzgados de Via Alemania y pasar a disposición judicial.
El Juez le ha retirado el pasaporte, le ha impuesto comparecencias periódicas y la prohibición de salida del país. Tal y cómo ha solicitado la Fiscalía.
Asimismo, el arrestado está siendo investigado por cuatro delitos de homicidio imprudente y lesiones imprudentes.
Precisamente la detención del empresario se produjo una vez hubo concluido la investigación del derrumbe, que ha determinado que la terraza que colapsó parcialmente había sido reformada para explotar como negocios sin disponer de permiso para ello, no fue reforzada y recibió una sobrecarga de peso que provocó su hundimiento, ha informado este miércoles la Policía Nacional.Los hechos ocurrieron el pasado 23 de mayo, sobre las 20:20 horas en el Medusa Beach Club, un local de ocio de la primera línea de la Playa de Palma, donde una parte de la terraza en la que se encontraban clientes y trabajadores se desplomó.
Como consecuencia del derrumbe fallecieron 4 personas y hubo 14 heridos.
La investigación por parte del Grupo de Homicidios de la Policía, junto con los informes técnicos del Ayuntamiento de Palma, determinó que había colapsado parte de una cubierta que se unió a la terraza del local para la explotación del negocio para la que no se disponía de licencia o permiso.
La estructura no había sido reforzada para dicho uso y como consecuencia de las modificaciones había recibido una sobrecarga de peso. Ese peso añadido a la estructura, junto con el de las personas que estaban allí, provocó el colapso de la estructura y su hundimiento.
La terraza de este restaurante-bar de la principal zona turística de la ciudad no tenía licencia de actividad municipal para poder acoger clientes, por lo que el uso de la zona del edificio que se derrumbó era ilegal. Como precisó el Ayuntamiento de Palma, tanto el sótano del inmueble, donde se ubicaba un bar musical, como la planta baja, con uso de restaurante, sí disponían de las preceptivas licencias, pero no la terraza que colapsó.
De acuerdo con el consistorio, la terraza ilegal se derrumbó por la combinación del sobrepeso derivado de obras realizadas de forma irregular en ese espacio y la sobrecarga de 21 clientes que se encontraban sobre la primera planta cuando la terraza se vino abajo.
Los fallecidos son una trabajadora del establecimiento de 23 años natural de Navarra, dos turistas alemanas de 20 y 30 años y otro cliente de 44 años, un senegalés residente en Palma.