Laura, la nieta de la mujer agredida por una vecina en Palma: "Podría haber matado a mi abuela"

Laura Gómez, nieta de la mujer agredida por una vecina de 37 años en Palma, ha mantenido un encuentro con Crónica Balear y ha asegurado que “no es la primera vez que agrede a alguien”.

Los hechos tuvieron lugar en la mañana del 25 de abril, cuando Antonia, de 78 años, salió a comprar a la frutería que se encuentra a escasos 50 metros de su casa, en la barriada de Son Cladera. Fue en ese momento, cuando se cruzó con su vecina, que sin mediar palabra alguna, le asestó una paliza.

“Le pegó en la cara y comenzó a darle patadas”. En ese momento, Antonia se refugió de su agresora -que huyó del lugar- para pedir ayuda a gritos, sin saber que la vecina volvería al lugar para a agredirla hasta provocarle un ictus del que todavía no sabe si podrá recuperarse, además de múltiples hematomas.

NO ES LA ÚNICA VÍCTIMA

Antonia no es la única víctima. Un hombre, fue agredido escasos minutos antes por esta vecina (que según han comentado los vecinos de la barriada, padece de esquizofrenia), provocándole la rotura de una prótesis dental.

Según ha podido saber este medio, el hombre interpuso una denuncia ante el Cuerpo Nacional de Policía.

Al parecer, la agresora tiene un perfil fijado a la hora de buscar a sus presas: “ancianos y si tienen el pelo rubio, mejor para ella”.

UNA VECINA MUY CONOCIDA EN EL BARRIO

La vecina, que ya cuenta con varias denuncias y una orden de alejamiento, es una mujer de mediana edad muy conocida en el barrio por sus continuos episodios de violencia.

Una residente con la que ha contactado este medio, ha destacado que “va pidiendo dinero o tabaco y si no se lo das se pone agresiva”.

Esta misma vecina, ha asegurado que la han visto esgrimiendo un cuchillo, el cual luego esconde dentro de su manga.

“LLAMA A LA POLICÍA DICIENDO QUE LA HEMOS AGREDIDO”

Ayer tarde, los medios nacionales se hicieron eco de lo ocurrido y acudieron hasta la calle de Cala Gran de Son Cladera, donde la misma vecina salió al balcón dirigiéndose a los periodistas: "Me han pegado. Yo a esa mujer no la conozco de nada y encima sus familiares me han pegado. El ictus le ha pegado solo".

Minutos más tarde, una dotación de la Policía Nacional acudió hasta la vivienda para trasladarla hasta un centro hospitalario, para evaluar los supuestos daños.

Ante esta situación, Laura ha recalcado que: “siempre hace lo mismo. Cuando agrede a alguien luego denuncia que recibe amenazas”. “Ya no sabemos qué hacer”, lamenta Laura.

“MI ABUELA NO PUEDE HABLAR NI COMER”

Siguiendo con el estado de Antonia, su nieta se ha mostrado muy preocupada por su estado: “no puede ni hablar ni comer. Tiene la parte derecha del cuerpo completamente paralizada por el ictus y los médicos no saben cómo evolucionará”.

Si algo ha podido saber la familia de Antonia, es que continuará hospitalizada en la Unidad de Ictus de Son Espases al menos dos meses más. “Mi abuela tiene que aprender a hablar y a hacer todo de nuevo”.

Por su parte, Laura ha comentado que su abuelo no lleva nada bien el tema: “mi abuelo no lo lleva nada bien. No dice nada, pero no lo lleva bien”.

Ahora, solo esperan que el estado de Antonia evolucione favorablemente y que la justicia tome cartas en el asunto: "hemos interpuesto la denuncia correspondiente en la Policía Nacional, pero esta mujer sigue en su casa como si nada”, ha concluido Laura.