Condenan las agresiones a los dos vigilantes de seguridad de El Corte Inglés de Palma
Aseguran que los vigilantes de seguridad desarrollan su profesión en "una total indefensión jurídica"
Redacción | 18/03/2024
La Federación de Trabajadores de Seguridad Privada de la Unión Sindical Obrera (FTSP-USO) en Baleares ha condenado este lunes las agresiones a dos vigilantes de seguridad en El Corte Inglés de Palma.
Esta Federación de Trabajadores de Seguridad Privada ha lamentado tener que condenar, una vez más, la agresión padecida por dos vigilantes de seguridad en un famoso centro comercial de Palma, "simplemente por realizar su trabajo".
"Para nuestra desgracia, las agresiones a vigilantes de seguridad en sus puestos de trabajo son más habituales de lo deseado y menos conocidas de lo que deberían", ha añadido y, por este motivo, ha condenado las agresiones, asegurando que seguirán haciéndolo "hasta que se le ponga remedio", además de explorar que opciones legales que pueden tener como representantes de los trabajadores del sector.
Pues, según FTSP-USO, los vigilantes de seguridad desarrollan su profesión en "una total indefensión jurídica", así como con "una carencia total de medios de protección y, en muchos casos, con una precariedad laboral que pone en riesgo la integridad física de quienes cada día que se ponen el uniforme".
Razones que, en su opinión, provocan el "desprecio" de determinados segmentos de la sociedad hacia su labor y las agresiones a trabajadores "por realizar única y exclusivamente su trabajo".
En este sentido, desde FTSP-USO han reclamado una mejor cobertura legal, no solo en el caso de agresiones si no que siempre que los vigilantes de seguridad desarrollen su profesión, puesto que son un sector complementario a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y "esenciales" para la sociedad según la legislación.
Que se prime la dotación de medios de defensa y protección adecuados en los servicios que sean necesarios ha sido otra de las reclamaciones sindicales, debido a que en la actualidad "no se realiza en muchos casos por una cuestión de imagen requerida por el cliente", según han apuntado.
Asimismo, y para terminar, desde FTSP-USO han exigido evitar la precarización de los servicios "por una cuestión económica única y exclusivamente", pues, han concluido, "no es de recibo que determinados servicios se hagan con un solo vigilante de seguridad, sin cobertura legal, ni medios de protección y, o, defensa".
Tal y como adelantó Crónica Balear, este pasado sábado tuvo lugar un violento incidente en El Corte Inglés de Jaime III cuando un joven, menor de edad y de nacionalidad española atacó brutalmente a dos vigilantes de seguridad.
Los hechos ocurrieron en torno a las 11.30 de la mañana después de que un joven fuera sorprendido por la seguridad del centro robando diferentes prendas tras salir del probador.El chico, después de ser alertado por los vigilantes y pedir que se identificara y sacara la ropa de su mochila, comenzó a insultarles y les atacó con suma violencia hasta el punto de tumbarles en el suelo y propinarles diferentes golpes.
Según pudo saber este medio, los vigilantes de 53 y 48 años resultaron gravemente heridos. Así, los sanitarios del SAMU 061 se encontraron a una de las víctimas que había sufrido fuertes golpes en la cabeza y sangraba por los ojos después de que el agresor le introdujera los pulgares.
El otro vigilante también sufrió heridas de diferente índole, como un mordisco en la oreja, la cual le desgarró, y asimismo lesiones en los ojos y en la cabeza.
Una vez que ambos estaban casi inmóviles en el suelo a causa de sendas palizas, el agresor huyó y finalmente fue detenido por la Policía Nacional muy cerca de Jaime III.
El joven no ofreció resistencia durante el arresto y se mostró llamativamente tranquilo.
Hasta el lugar del suceso se desplazaron numerosas patrullas de la Policía Nacional, así como una ambulancia del SAMU 061 para atender a los heridos que se encontraban visiblemente alterados y con las pulsaciones muy elevadas.
También acudió el padre del menor que se acercó a los vigilantes, acompañado por los agentes, para disculparse asegurando que su hijo "tenía problemas psiquiátricos".