Un joven se da a la fuga tras un accidente en Palma y lo identifican al regresar al lugar a escondidas
El conductor ha triplicado la tasa máxima de alcoholemia
Marina J. Ramos | Mallorca, 09 de Marzo de 2025 | 11:58h

Un joven ha acabado detenido este domingo de madrugada en Palma tras estrellarse con el coche, darse a la fuga y volver al lugar a escondidas. Pese a los intentos por exculparse del siniestro ante la Policía, finalmente ha quedado probada su implicación. El conductor ha triplicado la tasa máxima de alcoholemia.
El accidente se ha ocurrido sobre las cinco de la madrugada en la rotonda entre el Camí de la Vileta y el Camí dels Reis, frente al estadio de Son Moix. Varios testigos alertaban a esa hora que un BMW había entrado en la rotonda el Camí dels Reis, en dirección a Son Rapinya, a gran velocidad. Sin embargo, al entrar en la intersección, había perdido el control, se había subido a la acera y se había acabado estrellando contra un árbol. Tras ello, el conductor había bajado del turismo y se había subido en otro que circulaba tras de él, de unos amigos, dándose a la fuga y abandonando el coche siniestrado.
Un testigo del accidente ha podido hacer una foto a este segundo vehículo. Aunque no se identificaba del todo la matrícula del mismo en la imagen, sí le ha servido a los agentes después para poder determinar la marca y el modelo del coche en cuestión, un Volkswagen Golf Serie 5. Con esta información, varias dotaciones de la Policía Local han emprendido batidas por la zona, para tratar de localizar el turismo.
Sin embargo, unos veinte minutos más tarde, el mismo vehículo ha regresado al lugar del accidente. Al ver el coche, la Policía enseguida le ha dado el alto y han localizado al conductor responsable del suceso en el asiento de atrás. Al preguntarle por lo sucedido, el hombre no ha sido capaz de dar explicaciones coherentes, estando notablemente ebrio. Entre las alegaciones, aseguraba que estaba durmiendo y que le había prestado el turismo a un amigo que le había llamado, quien, recalcaba, conducía en el momento del siniestro.
Las explicaciones no han convencido a los policías, pues, al requerirle más información, el conductor aseguraba saber solo el nombre del supuesto amigo, sin contar con su teléfono de contacto y sin poder proporcionar más datos sobre esta persona. Ante las contradicciones en su declaración y la identificación por parte de uno de los testigos, la Policía ha dado por probado que se trataba del conductor.
Pese a ciertas reticencias, el hombre ha accedido a realizarse la prueba de alcoholemia, con un resultado el triple del máximo permitido. La Policía le va a imputar un delito contra la seguridad vial por circular bajo los efectos de bebidas alcohólicas