Descubren un tratamiento innovador que podría prevenir el desarrollo de la diabetes
EP | 08/12/2022
Investigadores del laboratorio Liston, en el Instituto Babraham (Reino Unido), han hallado recientemente una terapia preventiva de la diabetes en ratones.
En concreto, el equipo ha logrado prevenir la diabetes en roedores manipulando las vías de señalización de las células pancreáticas para evitar la muerte celular inducida por el estrés. El tratamiento se dirige a una vía común a los dos tipos principales de diabetes y, por tanto, podría tener un enorme potencial terapéutico una vez se traduzca en un tratamiento clínico.
"Nuestros resultados demuestran que la proteína Manf podría prevenir el daño de las células beta al evitar la inflamación en los islotes, que es una característica distintiva de la diabetes de tipo 1", afirma el doctor Kailsah Singh, antiguo investigador del laboratorio de Liston.
Durante más de 35 años se han realizado intentos fallidos de prevenir el desarrollo de la diabetes tipo 1. Pero el doctor Adrian Liston, jefe de grupo del programa de investigación sobre inmunología, quería averiguar si había algo más que causara el deterioro en las fases avanzadas de la enfermedad, aparte de la respuesta inmunitaria.
El laboratorio de Liston pretendía comprender el papel de la muerte celular en el desarrollo de la diabetes y, por ello, abordó este problema identificando las vías que deciden si las células productoras de insulina estresadas del páncreas viven o mueren y, por tanto, determinan el desarrollo de la enfermedad.
Su esperanza era encontrar una forma de detener esta muerte relacionada con el estrés, evitando el declive hacia la diabetes sin necesidad de centrarse únicamente en el sistema inmunitario.
En primer lugar, los investigadores tenían que saber qué vías influirían en la decisión de vida o muerte de la célula beta. En investigaciones anteriores, lograron identificar a Manf como proteína protectora contra la muerte celular inducida por estrés, y a Glis3, que fija el nivel de Manf en las células. Aunque la diabetes de tipo 1 y la de tipo 2 suelen tener causas distintas y una genética diferente, la vía GLIS3-MANF es una característica común a ambas dolencias y, por tanto, una diana atractiva para los tratamientos.
Para manipular la vía Manf, los investigadores desarrollaron un sistema de administración de genes basado en un virus modificado conocido como sistema de administración de genes AAV. El AAV se dirige a las células beta y permite que estas produzcan más Manf, una proteína que favorece la supervivencia, lo que inclina la balanza entre la vida y la muerte a favor de la supervivencia.
Para probar su tratamiento, los investigadores trataron a ratones susceptibles de desarrollar diabetes autoinmune de forma espontánea. El tratamiento de ratones prediabéticos redujo la tasa de desarrollo de diabetes del 58 al 18 por ciento. Esta investigación en ratones es un primer paso clave en el desarrollo de tratamientos para pacientes humanos.
"Una de las principales ventajas de dirigirse a esta vía concreta es que es muy probable que funcione tanto en la diabetes de tipo 1 como en la de tipo 2", explica el doctor Adrian Liston. "En la diabetes de tipo 2, aunque el problema inicial es la insensibilidad a la insulina en el hígado, la mayoría de las complicaciones graves surgen en pacientes en los que las células beta del páncreas se han visto sometidas a un estrés crónico por la necesidad de producir cada vez más insulina. Si tratamos la diabetes tipo 2 precoz con este método u otro similar, podemos bloquear la progresión hacia los principales efectos adversos de la diabetes tipo 2 tardía", finaliza.