La exigencia de subir sueldos centra un Primero de Mayo en campaña electoral

La exigencia de subidas salariales para paliar la pérdida de poder adquisitivo de los trabajadores en la crisis de inflación protagonizará un Primero de Mayo marcado por la cercanía de las elecciones autonómicas y municipales del 28 de mayo.

Con más de 70 manifestaciones convocadas en toda España bajo el lema "Subir salarios, bajar precios, repartir beneficios", UGT y CCOO han puesto este año en el centro la necesidad de incrementar los sueldos ante una escalada de precios tras la que señalan "al exceso de beneficios empresariales".

"Necesitamos salarios decentes que crezcan en parámetros equivalentes a la inflación, garantizando el poder de compra. Para ello, la cláusula de garantía salarial es imprescindible", reza el manifiesto conjunto para una jornada que estará marcada por la campaña electoral.

A la manifestación de Madrid, que transcurrirá desde Gran Vía en la esquina con la calle Alcalá hasta la Plaza de España, está previsto que acuda, como otros años, la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, así como otros representantes del ala socialista del Gobierno y de otros partidos progresistas.

UGT y CCOO llegan a la cita tras buscar desde hace meses desbloquear unas negociaciones con las patronales CEOE y Cepyme en aras de un nuevo acuerdo que sirva de guía para la negociación colectiva.

El principal escollo para este pacto sigue en la inclusión de cláusulas que garanticen el mantenimiento del poder adquisitivo de los trabajadores, una condición clave para los sindicatos que la patronal rechaza.

En este contexto, los sindicatos han venido defendiendo la campaña "salario o conflicto" para movilizar empresas y sectores en busca de acuerdos y que intentarán intensificar si no se logra ese acuerdo.

Aunque la reivindicación central pasa por los salarios, los sindicatos también llegan a este Primero de Mayo con varias exigencias al Gobierno como que "mueva pieza en el ámbito fiscal para transferir rentas a los hogares que lo necesiten" o la necesidad de revisar el coste del despido.

"En nuestro país aún es demasiado fácil y barato despedir. Tenemos que avanzar hacia un precio del despido disuasorio, justo y adecuado a las circunstancias sociales, vitales y de reempleabilidad de las personas afectadas", reclaman en el manifiesto.

Y en clave electoral, CCOO y UGT animan a participar en las próximas elecciones apoyando "las propuestas electorales de progreso".

Desde otros sindicatos, como CSIF también han señalado sus reivindicaciones para este Primero de Mayo que comienzan por modificar la Ley Orgánica de Libertad Sindical "para abrir la representación al conjunto de la sociedad española".

"CSIF es la alternativa ante el conformismo de los sindicatos de clase con el Gobierno: denunciamos el empobrecimiento social y la incertidumbre económica", recogen en un comunicado.