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Es muy sorprendente ver como los actuales partidos políticos que forman parte de los distintos gobiernos de coalición de izquierdas que gobiernan Baleares, Menorca, Mahón y Ciutadella, principalmente, se han lanzado a una carrera inaudita de promesas electorales.
Cualquiera diría que estos partidos de izquierda están en la oposición y gobierna la derecha. Me refiero a PSOE, Podemos y Més per Menorca.
Tanto en el caso del gobierno de Baleares de Francina Armengol del PSIB-PSOE, como en el de Susana Mora, también del PSOE Menorca en el Consell Insular, ambos con los apoyos de Podemos y Més per Menorca, han sido 8 años de acción de gobierno.
Durante esos 8 años no han hecho prácticamente nada para solucionar los verdaderos problemas que preocupan a los menorquines.
Vayamos por partes. La carretera general lleva paralizada sin proyecto durante todo este tiempo.
Ahora, justo ahora, han modificado un tramo, como si eso fuera suficiente.
Tampoco han resuelto el tema pendiente y urgente del segundo cable submarino.
Ni el problema del agua y su sobrecoste de las desalinizadoras. Ni el ya enquistado problema de la vivienda en Menorca que ya alcanza cotas
dramáticas.
El paro juvenil sigue por las nubes. Todo ello por no hablar de la milonga de las
energías renovables. Los famosos molinos de Milá cuestan una barbaridad y sólo producen el 0’37% de la energía que se consume en Menorca, además, están todo el día averiados y las costosas reparaciones y mantenimiento sólo encarecen la energía que pagan los menorquines.
A todo ello podríamos añadir los problemas de seguridad, la ocupación ilegal de viviendas y un largo etcétera más de problemas.
Ahora bien, prohibiciones todas las del mundo. Prohibición de nuevos amarres y puertos deportivos en 15 años. Prohibición, modo moratoria, de nuevas plazas hoteleras durante 4 años, prohibición y limitación para pescar, cazar, fondear un barco, jugar a las cartas y al parchís.
Prohibición de los coches diésel cuando no está todavía demostrado que los coches eléctricos sean viables.
Por cierto, las baterías de litio desechadas de esos coches contaminan más que el diésel quemado por los primeros. Es el gobierno de la prohibición. Todo está prohibido y para todo hay que pagar tasas e impuestos. La pregunta que cabe hacerse es ¿nos cobrarán por respirar o salir a la calle?
Bueno, quizá si respiramos en catalán nos den una subvención para que podamos inspirar un poco más de aire en cada bocanada.
La doctrina de la agenda 2030, de Davos y del FMI: “En 2030 no tendrás nada y serás feliz”.
Estaremos en sus manos y estaremos perdidos. Tenemos que despertar de este sueño progre que nos lleva a la más absoluta de las ruinas. Pero yendo al título del artículo, tareas pendientes para Vox. Pues sencillamente revertir todo
esto. Devolver la soberanía de las principales decisiones a España. Retomar el control de nuestros intereses en beneficio de los ciudadanos menorquines, baleares y españoles.
No nos pueden seguir engañando. Podemos seguir en la Unión Europea, claro que sí, pero sin renunciar a nuestra soberanía e independencia. No podemos poner nuestras vidas en manos de la nefasta Agenda 2030, necesitamos ya la Agenda España.
Siento una honda preocupación por la deriva radical, globalista y deudora de una especie de nuevo orden mundial que nos quiere esclavizar suprimiendo la propiedad privada y la legítima autonomía de las naciones para decidir su futuro.
Hay que despertar de este sueño progre que nos tiene anestesiados. Menorca, Baleares y España necesitan un urgente cambio de rumbo, de lo contrario chocaremos con el iceberg de la ruina, de la miseria y de la más absoluta de las pobrezas.
Después será demasiado tarde, ya habremos vendido todo lo que teníamos y no nos quedará nada.
Todavía estamos a tiempo, aún nos quedan fuerzas con las que luchar, aún nos queda ilusión y dignidad; orgullo y patriotismo para defender lo nuestro, nuestras familias, nuestras propiedades, nuestro estilo de vida, nuestra cultura, nuestras costumbres. Todavía nos queda Vox.
Xisco Cardona. candidato de VOX Menorca al Parlamento balear y a la Alcaldía del Ayuntamiento de Mahón
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