Un instituto mallorquín lleva un año reclamando 34.000 euros de un viaje de estudios que nunca se hizo
Redacción | 16/03/2021
El 23 de marzo de 2020, los alumnos del primer curso de Bachillerato del IES Guillem Cifre de Colonya tenían planeado marcharse a Praga para culminar su curso escolar en un viaje de estudios.
Las familias de un total de 57 alumnos pagaron 600 euros cada uno para pagar el avión, el hotel y las excursiones del viaje. El estado de alarma y la cuarentena, poco después, frustró los planes de los alumnos. Intentaron cambiar las fechas, y lo consiguieron posponer, de forma gratuita, para un mes más tarde.
Pero un mes más tarde, en mayo, aunque nadie lo imaginaba en aquel momento, la cuarentena todavía duraba, frustrando por segunda vez el esperado viaje de estudios. La agencia que lo había organizado todo, Halcón Viajes, les ofreció entonces devolverles el dinero.
Las familias aceptaron, ante la imposibilidad de acordar nuevas fechas entre tantas personas, y se dispusieron a recibir de vuelta el dinero del viaje. La suma total de dinero a devolver supera los 34.000 euros.
Un año después, y tras numerosas reclamaciones y denuncias en la Dirección General de Consumo, la agencia sigue sin devolver el dinero. Las familias, representadas por la dirección del colegio, han pedido de forma incansable el dinero que les pertenece.
Pero la agencia les responde que la suma se utilizó para pagar los servicios que se contrataron, como el vuelo, las excursiones o el hotel, y ninguna de las entidades responsables les devuelve el dinero.
Los afectados han organizado incluso recogidas de firmas, pero tras la falta de respuestas, se plantean iniciar acciones judiciales contra la agencia de viajes.
La jefa de estudios del instituto, Xesca Borràs, ha explicado que desde la dirección del centro les han ofrecido todo su apoyo y han hecho "todo lo que han podido", pero se encuentran con barreras burocráticas que les impiden seguir actuando en nombre de los padres. La reclamación a Consumo, por ejemplo, que el instituto no puede hacer porque no es el cliente directo de la agencia.
De todas formas, Borràs ha expresado su intención de luchar hasta el final: "Estos padres han pagado por unos servicios que no han disfrutado, por lo que el dinero les pertenece. El disgusto que los niños han tenido por no poder salir de viaje se suma al dinero que han perdido los padres. Estamos pasando un invierno muy malo en Mallorca, y 600 euros para algunos supone muchísimo. Tendrían que tenerlo de vuelta".
Por su parte, la presidenta de la Apima del colegio y una de las madres afectadas, Juana María Bibiloni, es quien ha tomado las riendas de la causa. Cuando acudió a Consumo para registrar una reclamación, le explicaron que tenía que ir a la Inspección de Turismo, al ser un viaje combinado con un paquete de hotel.
Además, ha puesto de relieve un hecho curioso: registró un reclamación a través del Ayuntamiento de Pollença, pero al parecer, dicha queja no ha llegado a ningún sitio. La entidad que debía gestionarla alega que no le ha llegado, y el Consistorio asegura que la ha enviado.
Aunque los trámites burocráticos están alargando el proceso, Bibiloni está segura de que los padres acabarán viendo su dinero de vuelta: "Estamos seguros. Llegaremos hasta el final".