HORECA Baleares clausura Menorca: “con sus negocios se han visto muy reforzados como imagen del sector”

Vanessa Abad de Taramona | 25/03/2023

HORECA Baleares - Menorca llega a su fin dejando muy buen sabor de boca a todos los profesionales que han participado en la feria.

No era fácil; el espacio era más pequeño que el de sus homólogas en Mallorca e Ibiza y por primera vez se hacía en la isla. Pero tenían la receta; un evento que sirviera para reforzar las relaciones entre expositores y visitantes profesionales y que todos ellos pudieran establecer nuevas alianzas. También contaban con los ingredientes; ilusión, muchas ganas y unos productos y servicios de calidad que poder mostrar al cliente y que éste pudiera probar / degustar y experimentar 'in situ'.

José Luis Córcoles, director comercial de HORECA Baleares nos da algunas de las claves del evento y su visión del sector tras el mismo.

¿Cómo ha resultado esta primera edición de la feria en Menorca?

Muy positiva. Las empresas expositoras han quedado muy satisfechas, de hecho, muchas de ellas están deseando que llegue la próxima edición para repetir la experiencia. En cuanto a las que no han podido asistir, nos han buscado para que al año que viene nos acordemos de ellas, lo que significa que creceremos en espacio expositivo para dar cabida a todo ese interés y esa ilusión que se ha visto durante estos tres días de feria. Por último, los visitantes también se han mostrado satisfechos porque al final son los que tienen que decidir que sea una feria útil para el sector. En total han asistido en torno a unos 3.500 visitantes profesionales.

¿Qué impresiones le han trasladado los expositores que han participado en el evento?

Se han dado cuenta de que el volumen de negocios que se genera durante la feria es muy importante. Algunos de ellos nos comentaban que van a tener problemas para poder atender todas las peticiones producidas durante estos tres días ya que en un corto plazo de tiempo comenzarán las aperturas de los diferentes restaurantes y hoteles.

Para ellos ha sido una gran sorpresa porque se trata de una primera edición, no sabes lo que va a suceder y el resultado han superando sus previsiones más optimistas.


En el caso de Menorca, y teniendo en cuenta la gran representación que tienen de producto local, ¿tal vez se ha echado en falta más empresas de la isla promocionándolo en la feria?

Sí, lo que pasa es que Menorca tiene un gran problema y es que sigue siendo un sector primario muy potente, pero también muy pequeño, y lo que ocurre entonces es que en una feria profesional, donde el 80% del negocio se genera en la temporada turística, no hay posibilidad a que pueda nutrir lo que requiere el sector.

Los productores de vino, por ejemplo, nos han comentado que no tienen más vino que ofrecer a los restaurantes porque ya lo tienen todo vendido. Con lo cual, en esta feria el producto local ha tenido su representación, sobre todo de imagen, y esto es muy importante también, para que siga estando presente en las mesas de los hoteles y restaurantes en la medida en que sea posible.

Institucionalmente se tiene que promocionar fuertemente el producto local para mantenerlo vivo y para que se siga valorando. Si se hace de este modo, el producto local será siempre el más buscado y el más apreciado en la medida en que por porcentajes de producción sea posible implementarlo.

Si hacemos un análisis de las tres ediciones de 2023 en cada isla, ¿Cuáles son las características principales de cada una de ellas y en las qué se diferencia, además de por las dimensiones de cada feria?

Las tres arrastran el éxito de hacerse en una comunidad autónoma óptima en cuanto a turismo se refiere entonces, aunque en general en todas las islas todos los representantes y expositores manejan unos productos muy similares en cartera, Mallorca es la que aglutina el mayor volumen de negocios a nivel de producción y mayores kilos de importación. Ibiza es un evento en el que prima mucho el producto gourmet, más exclusivo, y en Menorca se prima mucho la calidad porque tiene que competir con un gran producto como el propio producto menorquín.

Al final cada isla tiene su propia idiosincrasia, las tres comparten un mismo origen y unas mismas sensaciones como es que vaya bien el sector, pero estas son las pequeñas peculiaridades.

Lo que tienen en común las tres es un mismo problema y es que en Mallorca y en Ibiza ya no hay espacio expositivo para dar cabida a todo lo que los expositores quieren promocionar y en Menorca, tras una primera edición, ya nos están pidiendo que por favor crezcamos para dar cabida a más empresas, en este caso en el recinto ferial de Mahón, pero tampoco hay espacio.

Entonces, ¿se han quedado empresas en el tintero?

Muchas no han participado porque en una primera edición a veces es complicado tomar la decisión, pero una vez que han visto como ha funcionado el evento para las empresas que estaban siendo partícipes, han solicitado apuntarse para la siguiente edición.

Directamente, han venido entre veinte o veinticinco empresas pidiéndonos que en el momento que sea posible la contratación del año que viene, puedan participar. Al final este evento supone un lugar de encuentro donde crear esas sinergias para que las temporadas sean lo más exitosas posibles. No nos olvidemos que es una feria de personas, de expositores donde se muestran productos y servicios, donde se establecen alianzas y acuerdos y donde con sus negocios se han visto muy reforzados como imagen del sector.

¿Es difícil coordinar un evento de estas magnitudes?

Muy complicado por el déficit de instalaciones para ferias profesionales. En Mallorca son 140 expositores, en Ibiza 100 y más de 40 en Menorca, por tanto, coordinar que todos cuenten con su espacio, con sus necesidades de luz, de agua, de desagüe… es decir, a nivel de infraestructuras resulta muy complejo y en cuanto a la contratación, comercialización y hacer que luego sea un éxito pues conlleva su dificultad, pero lo importante es que al final del proceso todo salga bien y eso significa ver a los profesionales reforzados, ilusionados y ver que les ha merecido la pena cada euro que han invertido con el fin de ser partícipes en el evento.

Precisamente, para las empresas que a veces dudan en invertir en promoción como por ejemplo en este tipo de eventos, ¿qué aporta HORECA al sector y como lo apoya?

Horeca aporta lo que no tienen en su día a día. En este caso que son los clientes los que vienen por tanto se encuentran con unas facilidades de mostrar el producto que de otra forma no tienen. Por ejemplo, una empresa que vende carne o croquetas puede demostrar allí mismo cómo sabe, cómo hay que cocinarla…. Si vende maquinaria, el visitante profesional puede ver 'in situ' cómo funciona.

Al final una feria como Horeca es una herramienta de marketing que facilita mucho las pautas comerciales y el acercamiento al cliente.

Desde vuestra experiencia y después de haber tomado el pulso a una buena parte de las empresas de las islas, ¿consideras que hay algún aspecto en el que podría mejorar la hostelería y la restauración en Baleares?

La hostelería en las islas tiene un nivel muy elevado en todos los sentidos, pero tenemos más bien problemas estructurales como es la insularidad o que los costes de la vida aquí hace que sea un problema dar cabida a todas las personas que necesita el sector para trabajar a nivel de infraestructuras logísticas de vivienda, o que los costes sean repercutidos con los sueldos que se tienen. Por tanto, hay que seguir trabajando en cuestiones que tienen que ver con cómo servir al sector. Faltan transportistas, camareros, personal de dirección... y si falta mano de obra, flaquea todo.

Yo creo que nos hemos dormido en los laureles a nivel sociedad. Hemos tenido mucho éxito y unos años muy importantes de crecimiento, pero nos hemos olvidado de lo que supone todo esto. En los años 60 los hoteles tenían habitaciones para dar cabida a sus empleados y ahora es como una novedad el hecho de que los hoteleros vayan a crear espacios para ellos. Las instituciones deben encontrar soluciones junto a los diferentes sectores profesionales para, entre todos, buscar soluciones óptimas y que no sean cortoplacistas sino a a medio y largo plazo.

HORECA no termina aquí, la próxima cita es en Mallorca con la 'Gran Final' del campeonato a la 'Mejor Elaboración de pescado descartable'… ¿Cuál es el balance de este primer concurso? 

La esencia es poner en valor desarrollo sostenible, que el pescado denominado como descartable se pueda utilizar y darle un valor culinario. El nivel de los cocineros ha sido magnífico y nos han demostrado que se puede hacer perfectas elaboraciones no solo comestibles, sino de gourmet.

El día 18 de abril es la gran final en Mallorca, donde participará el primer y segundo clasificado de cada isla para demostrar que lo que sale de las redes del pescador no se tiene porque tirar, sino que sea producto y que esté presente en nuestras mesas. 

Sentimiento general

Si te equivocas de voto, puedes desmarcarlo volviendo a hacer clic en el voto erróneo.
0
Comentarios

Hola!, escribe un comentario para esta noticia.Comentar


Lo más visto de la semana
Lo más comentado de la semana