Nervios, improperios y un "demonio" tras un accidente en Palma

Una pareja en gran estado de ebriedad ha sufrido esta madrugada un accidente en el Camí Vell de Bunyola, en Palma, al colisionar contra un semáforo. Tal era su embriaguez que apenas podían hablar con los agentes y mantenerse en pie, llegando la mujer a proferir improperios contra los policías y a vociferar, al llegar la grúa municipal, que ésta era el "demonio".      

El suceso se ha producido sobre las 04.15 horas a la altura del polígono Son Castelló, cerca de la rotonda de acceso a la Avenida 16 de Julio, cuando un Fiat Punto que circulaba en sentido centro de Palma por una recta con buena visibilidad ha acabado impactando contra un semáforo, junto a un paso de peatones.

En ese instante, una ambulancia del SAMU 061 ha dado voz de alarma del siniestro ya que se dirigía a otro servicio cuando se ha topado con el accidente. Al salir del coche, los ocupantes, un hombre y una mujer, apenas se mantenían en pie y caían al suelo cada vez que intentaban levantarse de nuevo, caminando incluso por medio de la carretera.

Al ver el estado en el que se encontraban, los sanitarios han avisado de inmediato a la Policía Local de Palma, que se ha desplazado hasta el lugar, donde continuaba la pareja. El hombre ha reconocido, entre balbuceos, que era él quien conducía y que el coche era de su propiedad. Su estado era tal que ha llegado a orinarse encima.

Mientras la mujer ha roto en insultos contra los agentes y estos apartaban a ambos de la vía, el hombre profería que había montado un negocio y que Hacienda le había "arruinado la vida", mientras ella continuaba acometiendo contra los policías. En un momento dado, la pareja ha comenzado a discutir mientras la mujer lo acusaba de ser un "maleante".

Minutos después, al intentar someter al conductor a la prueba de alcoholemia, éste se negaba a soplar mientras los agentes le advertían de que podía incurrir en un delito de negativa a someterse al someterse al alcoholímetro.

Una vez que los efectivos policiales han dejado que la pareja se fuese, hombre y mujer, de origen boliviano, continuaban tambaleándose y cayendo sobre los matorrales. Los agentes permanecían pendientes de ambos para evitar que volvieran a caminar por medio de la carretera. No obstante, lejos de alejarse, los ocupantes del coche regresaban de nuevo al lugar del siniestro donde, a la llegada de la grúa, la mujer, visiblemente asustada, ha comenzado a gritar que se trataba del "demonio".

Finalmente, la grúa ha retirado el turismo y ambos han caído rendidos en la acera, cerca de una gasolinera, donde se han quedado dormidos. Al cabo de un rato se han encaminado hacia Palma mientras ella intentaba parar a alguno de los vehículos que pasaban por la zona.