Piden 30 años de cárcel a tres hombres por un violento asalto a un matrimonio en Artà

La Audiencia Provincial de Baleares juzgará desde este lunes a tres hombres acusados de un violento asalto a un matrimonio en una casa de campo en Artà (Mallorca), en el que presuntamente amenazaron a las víctimas con cortarles un dedo si no les daban dinero y secuestraron al marido para llevárselo a un cajero a sacar efectivo.

La Fiscalía pide para los procesados penas que suman 30 años de cárcel por delitos de detención ilegal, robo con violencia en casa habitada con medios peligrosos y lesiones. Se prevé que el juicio dure toda la semana.

El suceso tuvo lugar en 2016, cuando los tres acusados, de 34 y 35 años en el momento de los hechos, presuntamente planearon asaltar la casa de campo del matrimonio, a quien uno de los acusados conocía porque vivía cerca. Según la versión del fiscal, este vecino habría planteado a su cómplice cometer materialmente el robo mientras que él le ofrecería refugio en su casa una vez hecho.

La noche del 9 de diciembre, este acusado y un tercer hombre, ataviados con pasamontañas, se dirigieron a la vivienda, entraron en la finca y se dirigieron al edificio principal por la puerta que daba a la piscina, que forzaron con una palanca.

Mientras estaban dentro de la casa, sobre las 23.50 horas, volvieron los propietarios. Los asaltantes se los encontraron en la parte exterior de la vivienda y abordaron por la espalda al hombre inmovilizándole con una pistola de descargas eléctricas, amenazándole para que dejara de forcejear.

Siguiendo con la versión del fiscal, los ladrones acorralaron al matrimonio en una esquina y les exigieron que les entregaran más dinero mientras blandían un cuchillo de cocina de 20 centímetros, amenazándoles con cortarles un dedo con expresiones como "la sangre destapa el dinero".

El marido les entregó la cartera, de la que cogieron 250 euros. Después le hicieron sacar varias joyas y relojes de una caja fuerte, y del bolso de la mujer sustrajeron joyas y 5.000 euros.

A continuación, presuntamente les exigieron 30.000 euros para dejarles en paz. En ese momento, el tercer implicado, el vecino que esperaba en su vivienda, llamó a su cómplice, y acordaron que llevarían al marido a sacar dinero.

Así, introdujeron violentamente a la mujer en el maletero de un vehículo del matrimonio y lo cerraron con llave, y mientras se llevaron al hombre a otro vehículo y se fueron a un cajero en Sant Llorenç para sacar efectivo. Uno de los asaltantes conducía mientras el otro esgrimía a la víctima con un cuchillo. Una vez en el cajero, consiguieron sustraer 550 euros.

Mientras, la mujer consiguió salir del maletero a través de los asientos del coche y huir para avisar a la Guardia Civil. Cuando los ladrones volvieron a la finca con el hombre, vieron que la mujer ya no estaba, y huyeron con el coche --robándolo-- a la casa de su cómplice. El vehículo apareció calcinado poco después.

Además de la pena de cárcel, la Fiscalía pide una multa y una indemnización por los efectos sustraídos, las lesiones y el daño moral. Igualmente solicita una orden de alejamiento en favor de las víctimas.