Los vigilantes de la Estación Intermodal de Palma: "No vamos a parar"

"Tremendamente decepcionados". Así han salido, en palabras del coordinador general de Alternativa Sindical en Baleares, Gabriel Gómez, los vigilantes de seguridad de la Estación Intermodal de Palma, que esta mañana se han reunido con Serveis Ferroviaris de Mallorca en aras a alcanzar un acuerdo para paliar la situación de inseguridad que aseguran sufrir a raíz de los diferentes conflictos y agresiones registrados en la estación.

"Tampoco esperábamos demasiado, pero tal cerrazón, no. Se han cerrado en banda, se niegan a discutir absolutamente ninguna de nuestras propuestas", se ha lamentado Gómez, quien ha señalado que, con unos servicios mínimos del 75 por ciento -de una plantilla actual de 40 efectivos-, los trabajadores irán a la huelga desde el próximo 29 de abril hasta el 22 de mayo. 

Visiblemente indignado, afirma que, con la reunión mantenida en la sede del Tribunal de Arbitraje y Mediación de las Islas Baleares (TAMIB) con SFM y la empresa adjudicataria, se les ha hecho "perder el tiempo. Es una tomadura de pelo".

Entre sus reivindicaciones se encuentran el incremento del número de vigilantes: "Cuando había 60 trabajadores queríamos 75, pero ahora somos 40". También buscan reintroducir la figura del guía canino de apoyo, ya que, "estadísticamente, está demostrado que un perro tiene mayor disuasión que un arma". "No pedimos el cielo, los perros ya estaban antes y los quitaron". Del mismo modo, solicitan presencia policial o personal armado dado que la Estación Intermodal "es una infraestructura crítica".

Acompañado por otros miembros de Alternativa Sindical como el coordinador de la entidad en Palma, Rafael Leyton, Gómez ha recriminado que desde SFM "tienen tan mala intención que han sacado el pliego de condiciones ayer para decirnos que sería como cambiar una letra de la Biblia: 'Irás al infierno y el niño Jesusito no te querrá'. Eso es mentira", ha aseverado, para recalcar: "Aquí hay una huelga y se la van a comer".

Sobre las consecuencias del paro previsto, el vigilante ha subrayado que "vamos a por unas reivindicaciones laborales, las huelgas a veces afectan a los ciudadanos. Les vamos a pedir un poco de paciencia, vamos a intentar ayudarles en todo lo posible porque no somos radicales y nos dedicamos a la seguridad de las personas". En cualquier caso, ha considerado que desde el Govern han sido "razonables" fijando unos servicios mínimos del 75 por ciento. 

Por su parte, el abogado que les representa, Luis Baena, ha explicado al término de la reunión que tanto SFM como la empresa adjudicataria del servicio de seguridad "se han negado a negociar". "Desde el sindicato hemos hecho una serie de propuestas, hemos intentado matizarlas, intentar llegar a un acuerdo para evitar la huelga, lo que pasa es que no nos han ofrecido absolutamente nada", ha incidido.

Asimismo, ha aludido al "agravio comparativo" que padecen los vigilantes con otros compañeros de la profesión: "cobran 500 euros menos que sus compañeros en el aeropuerto, cuando el servicio de la Intermodal es mucho más peligroso. Hay intervenciones prácticamente cada día. El otro día se intervino junto a la Policía Local más de nueve armas blancas. Ante el mayor peligro se tiene que pedir cien por cien el plus de inseguridad que establece el convenio. No pedimos nada más".

"La conclusión definitiva es que vamos a seguir con la huelga. Los trabajadores están dispuestos a pelear y, salvo que se atiendan nuestros requerimientos, no vamos a parar", ha sentenciado.