Cerca de 270.000 personas viven en riesgo de pobreza y exclusión social en Baleares
Redacción | 14/10/2022
Más de 262.000 personas se situaron en situación riesgo de pobreza y exclusión social en 2021 en Baleares, según el Informe del Estado de la Pobreza en las Islas 2022, que ha sido elaborado por la Red para la Inclusión Social (EAPN).
Porcentualmente, con los primeros datos oficiales sobre pobreza de los que se dispone desde que estallara la pandemia de la COVID, que el pasado año 2021 hubiera de 262.000 personas en riesgo de pobreza o exclusión social, significa un incremento "muy significativo" del indicador AROPE, que pasa del 20 al 22,4 por ciento.
Pese a estas cifras, el número de personas en riesgo de pobreza y exclusión social en Baleares se mantuvo el pasado año por debajo de la media nacional.
Esta misma tasa AROPE recoge que la pandemia ha dejado a más personas por debajo del umbral de la pobreza, pasando a situarse en el 17,6 por ciento, lo que en términos absolutos significa que en 2021 hubo en las Islas 207.000 personas con ingresos inferiores al 60 por ciento de la renta media.
Dentro de este colectivo, hay que señalar que un nueve por ciento de baleares se encuentran en riesgo de pobreza extrema; o dicho de otra manera, en las Islas hay 108.000 personas que viven con ingresos inferiores al 40 por ciento de la media de renta nacional.
En este punto, cabe destacar que, para 2021, el umbral para considerar que un hogar se encuentra en situación de pobreza severa fue de 6.355 euros por unidad de consumo al año; es decir, que cada personas había de subsistir con 281 euros mensuales en el caso de una familia de dos adultos y dos menores, o de 530 euros si vivía sola.
En cualquier caso, durante la presentación del informe de la pobreza en Baleares en 2022, el presidente de la EAPN en las Islas, Xavier Torrens, ha hecho hincapié en que las cifras presentadas este viernes "serían mucho peores si no se hubiera desplegado, desde todos los niveles de la administración, las medidas y políticas del denominado escudo social". A modo de ejemplo, Torrens ha asegurado que "sin el papel del sector público, a día de hoy en Baleares habría 171.000 pobres más".
Por su parte, el presidente del Parlament, Vicenç Thomàs, se ha mostrado dispuesto a "trabajar para, entre todos, encontrar una solución conjunta a esta situación, que permita tener una sociedad más igualitaria y democrática".
"Es el momento de coordinarse y ser solidarios para poder afrontar una situación como la actual, en la que hacen falta medidas valientes para conseguir que la igualdad de oportunidades sea un derecho en Baleares y que la inclusión social sea real", ha añadido.
PRIVACIÓN MATERIAL Y SOCIAL SEVERA
Por otro lado, el Informe del Estado de la Pobreza en Baleares 2022 revela que "la vulnerabilidad social es un término complejo y multidimensional, y afecta no solo a los grupos con rentas inferiores, sino también a otros colectivos que sufren privación de servicios básicos, dificultades de acceso a derechos y, o bien, falta de igualdad de oportunidades".
En esta línea, apunta a la privación material y social severa, como un indicador. De este modo, el Informe señala que, en 2021, el 6,1 por ciento de la población de Baleares vive sin poder hacer frente a al menos siete de los 13 conceptos de consumo básico definidos a nivel europeo, como no poder permitirse ir de vacaciones, al menos, una semana al año; no poder hacer frente a imprevistos, no poder mantener la vivienda a una temperatura adecuada, no poder participar de manera regular en actividades de ocio o no poder permitirse una conexión web para el uso personal en el hogar, entre otros. En términos absolutos, alrededor de unas 71.000 personas viven en condiciones de privación material y social severa.
Asimismo, el Informe revela que más del 42 por ciento de la población experimenta dificultades para llegar a final de mes, un porcentaje que se ha ido reduciendo desde 2018 pero que, cabe recordar, no tiene en cuenta la inflación registrada en los últimos meses.
Respecto a estas cifras, el director técnico de la EAPN en las Islas, Andreu Grimalt, ha reiterado que "es alarmante la situación del precio de la vivienda --tanto compra, como sobre todo alquiler, en Baleares, hecho que dificulta la vida cotidiana de muchas familias, que han de destinar buena parte de sus ingresos al pago del alquiler o a la cuota hipotecaria, y niega el derecho básico de la vivienda a muchas otras --por procesos de desahucio, por imposibilidad de emancipación o por otras circunstancias--".
Así lo demuestra, precisamente, que más de un 75 por ciento de las personas en riesgo de pobreza registran un gasto elevado en vivienda, frente a un 18 por ciento del total de la población.
Por este motivo, Grimalt ha creído que "desde las Administraciones se ha de diseñar y aplicar una política de vivienda clara y valiente que impulse la vivienda pública, fomente el alquiler social, impida los desahucios y la gentrificación y despliegue cualquier otra medida que garantice algo tan básico para el desarrollo de un proyecto de vida como es una vivienda digna, adecuada y accesible".
BAJA INTENSIDAD DE TRABAJO EN EL HOGAR
Otros indicar de que la vulnerabilidad social "es un término complejo" es la baja intensidad de trabajo en el hogar, que se da cuando la relación entre el número de meses trabajados por todos los miembros del hogar en edad de trabajar y el número total de meses que, en teoría, podrían trabajar todos los miembros es inferior al 20 por ciento.
En este sentido, más de 85.000 personas residentes en Baleares vive en hogares con baja intensidad de trabajo, una cifra mucho más elevada que la registrada antes de la pandemia.
Asimismo, el director técnico de la EAPN en las Islas ha apuntado que "el índice de desocupación ha perdido fiabilidad como medidor del éxito socioeconómico, puesto que actualmente tener trabajo no es garantía para escapar del riesgo de pobreza o exclusión". En la actualidad, alrededor de un 15 por ciento de las personas que tienen un trabajo remunerado se encuentran en situación de riesgo.
POBREZA EN RELACIÓN A LAS PENSIONES
Respecto a las pensiones, el Informe pone de manifiesto que el 38 por ciento de los pensionistas de las Islas, es decir, 76.000 personas reciben una renta inferior al umbral de la pobreza --681 euros--.
Además, más de 34.000 pensionistas están en situación de pobreza severa, al cobrar menos de 454 euros. Esta situación es muy similar a la registrada el año anterior.
RENTA Y DESIGUALDAD
La renta media por persona en Baleares es de 11.235 euros, hecho que supone un descenso de 1.423 euros respecto al 2020. En cambio, la renta media nacional bajó 23 euros, lo que hizo que por primera vez desde 2013 las Islas estuvieron por debajo. Además, la reducción es la más grande de todas las regiones.
Con todo, la desigualdad en Baleares, todo y mantenerse como la comunidad más igualitaria, ha experimentado un incremento en todos los indicadores.
Por este motivo, desde la EAPN han insistido en sus demandas de implementar las estrategias que permitan a la sociedad avanzar hacia una sociedad "más justa", tales como una "valiente " reforma fiscal, la garantía de acceso a derechos fundamentales --como la vivienda o la garantía de ingresos-- y, más a largo plazo, la reorientación del modelo económico.