Se cierra el caso de la muerte de "La Veneno"

La muerte de Cristina Ortiz "La Veneno" de un golpe en la cabeza en noviembre de 2016 trajo consigo numerosas preguntas. Su adicción a las drogas, su relación con un hombre de dudosa reputación - que supuestamente le agredió en más de una ocasión - y su ruina económica rápidamente desataron especulaciones sobre la causa real del fallecimiento de la musa de Pepe Navarro.

Su propia familia descartó la muerte accidental desde el primer momento y, durante los últimos años han luchado para reabrir el caso, convencidos de que Cristina habría sufrido una muerte violenta a manos de su expareja tras uno de los habituales desencuentros entre ambos, que mantenían una relación un tanto tormentosa.

Sin embargo, la Fiscalía Provincial de Madrid ha tumbado las esperanzas de la familia, ya que ha rechazado la reapertura de la causa de la muerte, alegando que tanto el informe de la autopsia como la investigación policial "ya descartaron la existencia de un presunto delito de homicidio".

Un informe encargado por la familia de "La Veneno" para esclarecer las causas de la muerte habría concluido con que ésta era "de origen violento y lesivo-homicida", por lo que intentaron recientemente reabrir el caso.

Sin embargo, la Fiscalía se remite al informe de la autopsia donde se recoge que la muerte "aconteció por un fracaso visceral multiorgánico con septicemia y hemorragia menigo-encefálica" y sostiene además que no existía en su cuerpo ninguna lesión de lucha o defensa que pudieran hacer pensar en una etiología violenta.

Añade que la petición de reapertura se basa en un informe pericial aportado por la acusación particular (la familia de "La Veneno" que se basa en el análisis de unas fotos "tomadas sin consentimiento en el hospital" y donde se señala que el cadáver tenía unas lesiones "que no son expuestas por el médico forense en su informe de autopsia" y que acreditarían la existencia de una muerte violenta que debería investigarse.

La Audiencia Provincial de Madrid ya se pronunció en su día sobre estas imágenes que no aparecen unidas al procedimiento y dijo que "aparte de ser fotos obtenidas de forma irregular y sin la autorización de los responsables del hospital", lo cierto es que la hipótesis de la muerte violenta se basaba "esencialmente" en una reinterpretación de datos ya existentes sobre un suceso acaecido hace más de cuatro años.

De hecho asevera que en el informe presentado por la familia aparecen "meras conjeturas" que carecen de "soporte probatorio" y que, por lo tanto no pueden conllevar ni a la reapertura del procedimiento ni a la catalogación como muerte violenta del fallecimiento de Cristina Ortiz.

Una dura derrota legal para la familia de "La Veneno", que convencidos de que había sido asesinada por su expareja, estaban dispuestos a llegar hasta el final, sin contar con que la Audiencia Provincial tumbaría su recurso.