Rocío Flores perfecciona su talento para la mímica tras las últimas declaraciones de su madre

En uno de sus peores momentos tras ver cómo su madre, Rocío Carrasco, ha hablado de su interminable guerra judicial con su padre asegurando que Antonio David Flores podría acabar en la cárcel por varias de las causas que tiene pendientes y confesando que confía en que la justicia reabra el caso de su demanda por lesiones psicológicas contra el padre de sus hijos, Rocío Flores intenta continuar con su vida al margen de la durísima docuserie en la que su progenitora está contando su verdad con pelos y señales.

Sin querer pronunciarse sobre las últimas declaraciones de su madre, Ro, que ha perfeccionado en tiempo récord su talento para expresar las cosas a base de mímica, no puede evitar que los gestos le delaten cuando le preguntamos cómo está su padre en estos momentos y si finalmente ella iniciará acciones legales tras los comentarios vertidos en diferentes medios sobre ella a raíz de la serie documental 'Rocío, contar la verdad para seguir viva'.

Muy seria y acompañada por uno de sus grandes apoyos, su novio Manuel Bedmar, Rocío guarda silencio cuando le preguntamos por su reciente reunión con su abogado, asegurando que "no tengo nada que decir" sobre la estrategia legal que seguirán tanto ella como su padre en relación a su hermano David o a la aparición de carteles llamando maltratador a Antonio David en los alrededores de su domicilio en Málaga.

Carraspeando cuando le preguntamos si ella podría dar su versión de lo vivido tanto al lado de su madre como de su padre, Rocío confirma con un asentimiento de cabeza que la procesión va por dentro, por lo menos en su caso; y, cuando le preguntamos cómo está Antonio David tras las durísimas acusaciones de su exmujer en su docuserie, la joven no puede menos que arquear las cejas, como diciendo '¿tú que crees?'. Un gesto de lo más significativo que te mostramos en el siguiente vídeo.