Vigilantes de seguridad de Son Espases: "Nos jugamos el tipo por 1.094 euros al mes"

Los vigilantes de seguridad del Hospital de Son Espases dan un golpe sobre la mesa. No pueden más. "Nos jugamos el tipo por 1094 euros al mes", critican desde el sector de seguridad privada del sindicato CSIF. Subrayan el incremento de agresiones que sufren, así como la imposición de funciones en sus jornadas laborales que no les corresponden y les exponen a todavía más riesgos. De momento continúan las negociaciones entre la empresa, Eulen Seguridad, subcontrata del hospital, y los vigilantes, que no descartan movilizaciones y acciones legales.

Critican que por miedo a perder al cliente -Son Espases-, la empresa no cuida de sus trabajadores y les obliga a ponerse en tesituras inadecuadas y no recogidas en el convenio laboral del sector. Es el caso, por ejemplo, de tener que apoyar al personal sanitario del área de Psiquiatría "pero nosotros no estamos cualificados, al contrario que los sanitarios de esta unidad. Son pacientes con unas necesidades específicas y no sabemos si les podemos hacer daño. Si se lo hacemos y nos denuncian, ¿qué hacemos? ¿quién nos protege? Porque por ley no entra en nuestras funciones", explica Antonio Solà Martín, responsable del sector de seguridad privada del sindicato. "Si no lo haces vienen y te dicen que mañana te sacan del servicio", advierte.

Otra de las funciones que no consideran pertinentes es que se les mande a hacer rondas de vigilancia en las llamadas "zonas críticas" del hospital, sin ningún tipo de protección ni siquiera información de a qué tipo de peligro se acercan: "Vigilamos los accesos a zonas peligrosas por alto riesgo de enfermedades contagiosas. De repente ves a sanitarios con los equipos de protección, pero tú no tienes y no sabes a qué te expones", critican.

AGRESIONES A VIGILANTES

El trabajo que se les pide, aseguran, conlleva un peligro y unas responsabilidades extra (de las que la ley no les llega a amparar del todo, dejándoles en algunos casos en un vacío legal del que tienen que defenderse individualmente) que no corresponden con el sueldo percibido: "Nos jugamos el tipo por 1.094 euros al mes", inciden. Las agresiones verbales y físicas a vigilantes de seguridad, ya sea por parte de pacientes, familiares o incluso presos hospitalizados, denuncian, han aumentado significativamente en Son Espases en los últimos años. 

"Los vigilantes somos como funambulistas. Si nos caemos, no hay red, no hay ley que nos sostenga. Al carecer de carácter de autoridad, una agresión de un ciudadano a un vigilante de seguridad sale muy barata, es como pegarle a cualquier otra persona", algo a lo que, recuerda el representante sindical de CSIF José Caballero, se ven expuestos diariamente, sobre todo en ambientes como los hospitalarios, con muchas y grandes tensiones constantes.

Ante las extralimitaciones en sus funciones, no establecidas en el convenio laboral del sector, piden un incremento salarial de 1,24 euros más la hora y una nómina que ascienda a los 1.300 euros para 2025, pues saben de antemano que no se les van a quitar este tipo de servicios, al solicitarlos por expreso el cliente de la compañía -en este caso, el propio Hospital de Son Espases-. Por el momento, continúan las negociaciones entre la empresa de seguridad y los trabajadores, aunque estos últimos amenazan con movilizaciones y acciones legales de no lograr un pacto que les compense el alto riesgo que corren.