Un cliente de un conflictivo bar de Palma provoca un accidente y un gran altercado con los vecinos

Un cliente ebrio del conflictivo bar de Palma donde este viernes otro cliente acabó apuñalado, ha provocado este domingo un accidente con cuatro coches implicados y ha protagonizado una gran trifulca con los vecinos. El hombre, un joven de 27 años, de origen boliviano y sin carnet de conducir, ha multiplicado la tasa máxima de alcoholemia por siete. Ha acabado detenido por la Policía Local y la Nacional le va a imputar un delito contra la seguridad vial. Los vecinos, dicen, están desesperados por las problemáticas que desencadena constantemente este establecimiento. 

Los hechos han ocurrido este domingo por la tarde en la esquina entre las calles Can Feixina y Bartomeu Torres, frente al bar 'Los Negros', en el barrio de Pere Garau. Según algunos testigos presenciales, dos clientes bolivianos que salían del local han ido a coger el coche, aparcado en la calle Can Feixina, pero, nada más arrancar, han embestido contra cuatro coches aparcados, hasta que, tras los sucesivos choques, el vehículo que conducían ha quedado inmóvil en mitad de la calle. Los ocupantes se han intentado dar a la fuga, pero los vecinos (con los que tienen constantemente problemas de convivencia debido a las múltiples peleas y conflictos que protagonizan los clientes del el bar) los han intentado retener. Ello ha generado en una respuesta agresiva de los ocupantes del coche, quienes les han insultado, amenazado e incluso han hecho algún amago de intentar agredirles.

En estos momentos de suma tensión, se ha unido a ellos otro cliente del bar, en estado visiblemente ebrio, amenazando e insultando a los transeúntes y vecinos de forma violenta y sin motivo alguno. Al generarse tal alarma social, con trifulcas entre vecinos y clientes del bar, se han movilizado a este punto varias patrullas de la Policía Nacional, hasta la llegada de la Policía Local de Palma. Una unidad de Atestados de este cuerpo se ha hecho cargo de las diligencias del accidente. Al realizarle la prueba de alcoholemia, el conductor causante del suceso ha multiplicado por siete la tasa máxima permitida de alcoholemia. Según ha reconocido él mismo a los agentes, no tiene carnet de conducir, ya que se lo habían retirado, precisamente, por conducir bajo los efectos del alcohol. El joven ha acabado detenido por la Policía Nacional y por su parte, la Policía Local le ha imputado un delito contra la seguridad vial.

LOS VECINOS, DESESPERADOS

Tal y como contaban tras el apuñalamiento de este sábado a Crónica Balear, los vecinos están desesperados. "Es una situación desesperante. Esto va a acabar muy mal. Hoy han chocado contra varios coches apenas arrancar 20 metros. Imagínate que recorren más distancia y se llevan por delante a alguien en un paso de cebra", advertía un vecino al equipo de Crónica Balear desplazado hasta este enclave este domingo.

Otra vecina denunciaba este sábado que "abren a las nueve de la mañana y cierran a las doce de la noche", pese a tener licencia de cafetería. "Sacan a los clientes a medianoche, pero se quedan bebiendo y montando escándalo por la calle, y muchas veces, acaban peleándose. Es insoportable", critican. Por las mañanas, las calles amanecen con orines de persona entre los coches, botellas de bebidas alcohólicas esparcidas por doquier y con las puertas del conflictivo local, nuevamente abiertas.