Tres heridos al estrellarse un coche contra una farola en Palma
Esther Ballesteros | 19/12/2021
Tres personas han resultado heridas esta madrugada tras un accidente en Palma al perder el control del vehículo en el que circulaban y empotrarse contra una farola, que ha quedado derribada sobre el suelo.
El suceso se ha producido sobre las cinco en el Camí de Jesús, más concretamente en el tramo situado entre la rotonda de Can Valero y la situada debajo de la Vía Cintura. En un momento dado, el turismo, un Toyota que circulaba sentido Palma, ha perdido el control, se ha subido a la acera y ha colisionado contra la farola, que ha acabado arrancando. El vehículo ha quedado cruzado en medio de la acera y el carril bici.
Como consecuencia del fuerte impacto, el resto de farolas de ese tramo se han apagado de golpe. Enseguida testigos que han presenciado el suceso han llamado a los equipos de emergencias, personándose en el lugar varias patrullas de la Policía Local y dos ambulancias de la Clínica Rotger, una medicalizada y otra básica.
Al su llegada, los efectivos han comprobado que en el coche circulaban tres personas: el conductor, un familiar que viajaba de copiloto y un empleado de de la empresa del primero. Cuando los agentes han procedido a interrogarle, el conductor se hallaba visiblemente nervioso y excitado, asegurando en todo momento que él no conducía -el coche se encontraba a su nombre-, sino que era su familiar quien iba al volante, al tiempo que se negaba a someterse a la prueba de alcoholemia pese a las advertencias de la Policía de estar incurriendo en un delito.
Los tres ocupantes han resultado heridos, si bien la peor parte la ha sufrido el familiar que iba en la parte trasera, quien, al parecer, no llevaba el cinturón de seguridad puesto y, al colisionar contra la farola, ha acabado empotrándose contra el asiento del copiloto, sufriendo graves heridas en la cara y fracturas de tibia y peroné. No obstante, su vida no corría peligro.
Los efectivos policiales han constatado que la parte trasera del asiento del copiloto se encontraba ensangrentada, por lo que no podía ser el familiar quien condujese el vehículo, pese a la insistencia del conductor por inculparle a él. El familiar, por su parte, no podía hablar y defenderse debido a las heridas sufridas en la mandíbula. Sin embargo, el copiloto ha sido quien finalmente ha instado al conductor a que dejase de mentir y confesara que era él quien llevaba el coche.
Finalmente, se le imputará al conductor un delito por negativa a someterse a la prueba de alcoholemia. El hombre se encontraba visiblemente ebrio y se sospecha, ante el estado de alteración en el que se hallaba, que también había consumido sustancias estupefacientes. Hasta el lugar también se ha desplazado una brigada de Emaya para limpiar la calzada de los restos del accidente, mientras que operarios de mantenimiento se harán cargo de reparar la farola derribada. Una grúa, finalmente, se ha encargado de retirar el Toyota accidentado.