Prisión permanente revisable para la madre que asfixió a su hija de 4 años en Sant Joan Despí
La acusada sedó a la menor antes de asfixiarla y luego intentó suicidarse
EFE | 23/10/2024
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha ratificado la condena de prisión permanente revisable impuesta a Maria Cristina R.E., responsable del asesinato de su hija de 4 años en 2021 en Sant Joan Despí (Barcelona). La acusada sedó a la menor antes de asfixiarla y luego intentó suicidarse.
La sentencia, previamente dictada por la Audiencia de Barcelona, fue confirmada por el TSJC, que mantuvo la condena por asesinato con alevosía, en concordancia con el veredicto del jurado.
Sin embargo, el tribunal anuló la aplicación de la atenuante analógica de confesión, aunque esto no afecta la pena final impuesta.
LA METICULOSA PLANIFICACIÓN DEL CRIMEN
La Audiencia de Barcelona, que también reconoció una agravante de parentesco en la condena, concluyó que Maria Cristina R.E. actuó con alevosía y premeditación al sedar y asfixiar a su hija.
Según el fallo, la acusada pretendía causar un profundo dolor a su expareja, quien había iniciado una nueva relación, como respuesta a la negativa de este a retomar la convivencia. El tribunal describió el crimen como el resultado de un "creciente estado de enfado, rabia, tristeza y frustración" en la madre, quien planificó detalladamente la muerte de la niña con el objetivo de infligir el mayor sufrimiento posible a su exmarido.
DISCREPANCIAS SOBRE LA ATENUANTE DE CONFESIÓN
Aunque en primera instancia la Audiencia de Barcelona le concedió a la acusada la atenuante analógica de confesión por colaborar con las autoridades en el esclarecimiento de los hechos, el TSJC no compartió este criterio. El tribunal argumentó que la conducta de la acusada durante todo el proceso judicial no fue decisiva para probar los hechos, lo que llevó a la anulación de esta atenuante.
COMPENSACIONES ECONÓMICAS Y AGRAVANTE DE PARENTESCO
Además de la condena de prisión permanente revisable, la Audiencia de Barcelona obligó a Maria Cristina R.E. a indemnizar a su expareja y padre de la menor, así como a los abuelos paternos, con un total de 400.000 euros. La sentencia subrayó que la acusada actuó con plena consciencia de que la muerte de su hija era una consecuencia natural y altamente probable de sus acciones.
Este caso, que ha conmocionado a la comunidad, se cierra con la confirmación de la máxima condena penal en el sistema judicial español para crímenes de esta naturaleza.
