Centenares de personas rechazan los desahucios tras el suicidio de dos hermanas
“No son suicidios, son asesinatos”
EFE | 02/07/2024
Unas 300 personas se han concentrado este martes en la plaza Sant Jaume de Barcelona convocadas por la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) tras el suicidio de dos hermanas que iban a ser desahuciadas el lunes en una vivienda del barrio San Andreu de Barcelona.
Bajo el lema “No son suicidios, son asesinatos”, impreso en decenas de pancartas, la PAH y otras entidades sociales han expresado su indignación ante lo ocurrido y han exigido el fin de “las muertes por culpa de la vivienda”.
A través de la lectura de un comunicado, además de cánticos y carteles, han expresado su repulsa de lo que consideran un sistema de “especulación y mercantilización” de la vivienda que, denuncian, “ha dejado de ser un derecho” en Barcelona.
“Un desahucio, un suicidio. A eso le llamaremos homicidio”, “Por el derecho a la vivienda” o “Menos turismo. Más humanidad”, son algunos de los mensajes que reflejaban las pancartas.
Los manifestantes también han coreado cánticos contra los representantes políticos, tanto del Ayuntamiento de Barcelona como de la Generalitat, cuyos edificios se ubican frente a frente en la plaza Sant Jaume.
“Vergüenza”, “Tenemos derechos: agua, luz y techo” o “No les importa la ciudadanía” han sido las principales consignas que cantaban los manifestantes.
Durante la concentración, han guardado un minuto de silencio en memoria de las dos mujeres fallecidas este lunes, pero también por el resto de los suicidios derivados de situaciones de desahucio en Cataluña.
La PAH asegura que la muerte de las hermanas no es “un caso aislado”, ya que se suman al de un hombre de 70 años en marzo de este 2024 en Sabadell, hallado sin vida horas antes de ser desalojado.
“Cuando la vida de dos hermanas vale 9.000 euros, es el momento de reflexionar en qué tipo de sociedad vivimos y en qué queremos vivir”, apunta el comunicado leído durante la protesta.
En este sentido, los manifestantes han exigido “el fin de los desahucios y la especulación, y la ampliación del parque de vivienda pública y asequible”.
Entidades sociales denuncian desde hace años la “expulsión” de los vecinos de la ciudad a causa de un modelo que prioriza el turismo y exigen su transformación por otro que “priorice” a los habitantes de Barcelona.
La tragedia de Sant Andreu
Dos hermanas de 54 y 64 años se suicidaron la madrugada del lunes, horas antes de ser desahuciadas de su domicilio en la calle Navas de Tolosa de la capital catalana.
Ambas mujeres tenían una deuda de 9.000 euros porque habían dejado de pagar el alquiler del piso en el que vivían, tras el fallecimiento de su madre en 2021 a causa del COVID-19.
El caso era desconocido para las instituciones de ayuda a la vivienda y para la gente del barrio.
Una vecina aseguró que las dos hermanas "no hacían mucha vida de barrio" y, en su caso, solo conocía a la mayor, con quien mantenía alguna vez charlas informales de portal y poco más porque "apenas salía de casa".
Los servicios municipales de vivienda no pudieron hacer un informe de vulnerabilidad de las dos hermanas porque en sus visitas "nunca pudieron contactar con nadie" ni respondieron a los mensajes que dejaron.