Operado a corazón abierto por morderse las uñas
Una bacteria le causó un nido en la válvula mitral de su corazón
Redacción | Mallorca, 30 de Junio de 2024 | 13:42h

La onicofagia, o lo que es lo mismo, morderse las uñas, es un hábito muy común para aliviar el estrés. Suele hacerse en momentos de nerviosismo o excitación, en momentos de inactividad o aburrimiento, pero también puede ser un hábito aprendido de los miembros de la familia. Sea como sea, hacerlo conlleva cierto peligro para la salud.
Entre los problemas más comunes se encuentran el desgaste dental, las infecciones bucales por la acumulación de bacterias y gérmenes bajo las uñas, mal aliento y problemas en la mandíbula, alteraciones en la mordida. Además, este hábito puede causar problemas gastrointestinales, como gastroenteritis o gastritis, debido a la ingesta de bacterias al morder las uñas.
Por otro lado, en los casos más severos las uñas terminan muy dañadas y es posible manifestar las siguientes alteraciones: lesiones en las cutículas, deformación de las uñas o deformación de las articulaciones de los dedos. También puede producir paroniquia (infección bacteriana o micótica en la piel situada alrededor de las uñas que aparece hinchada y enrojecida, puede llegar a ser crónica).
Un caso extremo es el de Mario Colomina, un joven que ha sufrido una grave infección por Staphylococcus aureus dada su fuerte manía de morderse las uñas.
Dicha bacteria le causó un nido en la válvula mitral de su corazón viéndose obligado a someterse a una operación a corazón abierto.
Este joven cuenta en sus redes que el primer síntoma fue una fiebre muy alta acompañada de vómitos, que le causó temblores e incluso le llegó a paralizar la pierna izquierda.
También ha explicado que la bacteria se propagaba cada vez que su corazón bombeaba sangre, causando embolias en el cerebro, riñones y bazo, lo que llevó a la necesidad de un reemplazo de la válvula mitral.
Por increíble que parezca, aunque el afectado advierte del peligro de comerse las uñas, admite que aún no ha logrado abandonar este hábito
TRATAMIENTOS PARA DEJAR DE MORDERSE LAS UÑAS
Existen varias opciones de tratamiento que pueden ayudar a dejar de morderse las uñas. Algunas se centran en los cambios de comportamiento y otras en las barreras físicas que impiden morderse las uñas.
- Mantener las uñas recortadas y limadas y las cutículas hidratadas. Las uñas cortas y lisas y las cutículas blandas hacen que sea menos tentador morderse las uñas.
- Hacerse la manicura con regularidad o utilice esmalte de uñas. Los esmaltes transparentes se nota menos. Llevar uñas artificiales puede evitar que se muerda las uñas y protegerlas mientras crecen. Cuidarse las uñas puede ayudar a reducir el hábito de morderlas.
- Técnicas de control del estrés si se muerde las uñas por ansiedad.
- Píntese las uñas con un esmalte de sabor amargo.
- Intentar realizar otra actividad, como apretar el puño o apretar una pelota antiestrés.
- Llevar guantes, vendas adhesivas o pegatinas de colores.
- Ponerse una muñequera que recuerde el mal hábito.