Ingenieros piden poner fin a las críticas hacia embalses y presas

El presidente de la Asociación de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de la Ingeniería Civil, José Trigueros, ha exhortado a "todos los decisores políticos" a "dejar de maldecir al hablar de embalses, presas o encauzamientos" y ha criticado la "falta de planificación hidrológica" en España.

"En el siglo XXI, no podemos mirar hacia otro lado, tenemos que tomar nota para que no se vuelva a repetir" una tragedia como la vivida en los últimos días, especialmente en la Comunidad Valenciana, explicó Trigueros. Subrayó la falta de alerta a la ciudadanía y los fallos en los planes hidrológicos como factores que amplificaron los efectos de una DANA que "no ha sido mayor que en otras ocasiones" en términos de lluvia descargada.

Además de desarrollar planes hidrológicos eficientes, las confederaciones hidrográficas deben ser dotadas de "suficiente personal técnico con conocimiento", añadió.

LA PRESA QUE NUNCA SE CONSTRUYÓ

Trigueros insistió en que "se tenía el conocimiento de que esto se podía producir e incluso había proyectos que hubieran evitado un desastre de este tamaño". Recordó el Plan Hidrológico Nacional aprobado en 2001 durante el gobierno de José María Aznar, que fue derogado en 2005 por el ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero.

Ese plan preveía construir infraestructuras como una presa en la Rambla del Poyo a su paso por Cheste, que "hubiera laminado la avenida de forma que no hubiera producido la cantidad de muertes que ha habido". Aunque no habría contenido por completo la riada, esta presa estaba diseñada para proteger hasta 16 pueblos, incluyendo Paiporta, Aldaia, Catarroja, Picanya y Massanassa, algunas de las localidades más afectadas por la reciente DANA.

Como ejemplos de infraestructuras que han demostrado su eficacia, Trigueros mencionó el desvío del cauce del Turia, construido tras las inundaciones de 1957 en Valencia capital, y el embalse de Forata, en Yátova. Este último evitó que varias zonas de la Alcudia, Algemesí y Sueca resultaran anegadas, ya que llegó al 100 % de su capacidad durante la riada.

PREVENCIÓN DE DESASTRES

El presidente destacó la necesidad de colaboración entre ingenierías para prevenir futuras catástrofes utilizando "las herramientas del siglo XXI". La prevención incluye invertir en la mejora y mantenimiento de infraestructuras, con tareas como la limpieza y mantenimiento de los cauces de los ríos, algo que "apenas existe en los actuales planes hidrológicos".

Vecinos valencianos afectados por la DANA han criticado las trabas oficiales para limpiar estos cauces. Trigueros reiteró que "este temporal ha demostrado cómo la acumulación de residuos sólidos, vegetación y sedimentos ha reducido drásticamente la capacidad de desagüe, agravando los efectos de las lluvias intensas". No obstante, destacó la importancia de manipular los cauces con cuidado, priorizando siempre la seguridad.

"La protección de la naturaleza y la recuperación de los cauces, nuestros bosques de ribera, es una gran inversión, pero hay que dar prioridad a la seguridad y la vida de las personas", concluyó.