Este alimento, que le estás dando a tus hijos o nietos, es peligroso para la salud

Uno de los alimentos más comunes en los menús infantiles es frecuentemente aceptado sin queja por la mayoría de los pequeños y resulta muy fácil de preparar, lo que lleva a que abuelos y padres recurran a él en comidas, meriendas y cenas. Sin embargo, muchas personas no son conscientes de que este alimento es una de las principales causas de muertes infantiles por asfixia y atragantamiento cada año. Te enseñamos cómo cortarlo para salvar la vida de tu pequeño.

El nutricionista Aitor Sánchez explica por qué las salchichas pueden ser peligrosas para los niños y cómo evitarlo. La mayoría de las personas corta este alimento en pequeños trozos redondeados, una práctica tradicional que puede ser peligrosa. Debido a su forma y tamaño, estos trozos tienen el tamaño adecuado para obstruir la faringe y bloquear las vías respiratorias, algo que también puede ocurrir con uvas y zanahorias. En caso de que esto ocurra, es crucial reaccionar de inmediato y seguir el protocolo de primeros auxilios.

La forma adecuada de cortar este alimento es en tiras a lo largo y luego en rodajas, cambiando la orientación del corte para obtener piezas en forma de media luna o cuarto de luna. Esto facilita que los niños puedan manejarlas mejor.

Aunque esta medida puede parecer exagerada, es sencilla de implementar y puede salvar vidas, ya que liberar las vías respiratorias cuando un alimento está atascado no siempre es fácil. Asimismo, la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria recomienda evitar el consumo de este alimento en niños menores de 3 años, y cuando se ofrezca a niños mayores, siempre debe ser bajo la supervisión de un adulto atento.

Otra preocupación relacionada con este tipo de alimento es la frecuencia de su consumo. En España, el consumo de carne procesada es alto, pero el exceso de sal, nitritos, nitratos y hierro hemínico en estos productos no es inofensivo. El consumo elevado de embutidos puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiovasculares y cáncer de colon. Por lo tanto, se recomienda no superar los 20 gramos de embutido al día y limitar su consumo a una o dos veces por semana.