¿Toallas con olor a humedad? El truco casero para eliminarlos de una vez por todas
Una combinación natural y económica que devolverá el frescor a tus toallas sin esfuerzo
Alicia Romero | Mallorca, 03 de Mayo de 2025 | 16:47h
Con el paso del tiempo, es común que las toallas, aunque se laven con frecuencia, conserven un olor desagradable a humedad. Ni el uso de suavizantes ni los lavados a altas temperaturas logran eliminar ese aroma rancio que parece haberse impregnado para siempre en el tejido. Esto se debe a la acumulación de residuos de jabón, humedad y bacterias que pueden quedar atrapadas en las fibras del algodón.
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UN TRUCO SENCILLO CON INGREDIENTES QUE TIENES EN CASA
El portal finlandés Herkkusuut ha compartido un truco casero eficaz para acabar con este problema sin necesidad de reemplazar las toallas por otras nuevas. Lo mejor es que solo se necesitan dos ingredientes comunes que probablemente ya tienes en casa: vinagre blanco y bicarbonato de sodio. Estos ingredientes no solo son económicos y fáciles de conseguir, sino que poseen propiedades naturales que ayudan a limpiar y eliminar los olores.
El vinagre blanco actúa como un desinfectante natural y ayuda a romper los residuos de detergente que pueden estar atrapados en las fibras de las toallas, además de neutralizar los olores.
El bicarbonato de sodio, por su parte, tiene una función abrasiva suave que puede eliminar la suciedad acumulada y también neutraliza los olores de manera efectiva.
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CANTIDADES Y PASOS PARA RECUPERAR TUS TOALLAS
Para aplicar este método, solo necesitas: 22,5 centilitros de vinagre blanco y 10 centilitros de bicarbonato de sodio.
En el primer lavador, coloca las toallas en la lavadora y selecciona un programa a 60 grados. Asegúrate de que la lavadora esté vacía de otros textiles para maximizar la eficacia del proceso. Añade el vinagre en el compartimento del detergente para que se libere durante el lavado y actúe sobre las fibras.
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Cuando termine el ciclo de lavado y antes de que comience el aclarado, introduce el bicarbonato de sodio en el mismo cajón del detergente. Este paso ayuda a neutralizar los posibles restos de humedad y eliminar el olor a rancio.
Deja que finalice el programa completo de la lavadora sin interrumpir. Es importante que no se suspenda el ciclo de lavado, ya que la combinación de vinagre y bicarbonato realiza una limpieza profunda que requiere todo el proceso.
CUIDADO CON EL SECADO: CLAVE PARA ELIMINAR LA HUMEDAD
Una vez finalizado el lavado, es crucial prestar atención al secado. Para evitar que el mal olor vuelva a aparecer, las toallas deben secarse en la secadora o, en su defecto, al aire libre en un lugar bien ventilado. La ventilación es esencial, ya que, si las toallas quedan guardadas húmedas o mal secadas, es más probable que el mal olor persista. Secarlas completamente ayuda a eliminar la humedad atrapada que podría fomentar el crecimiento de moho o bacterias.
Este sencillo truco funciona gracias a las propiedades limpiadoras del vinagre y el bicarbonato. El vinagre disuelve residuos y elimina los olores de forma natural, mientras que el bicarbonato absorbe la humedad y neutraliza los malos olores. Además, ambos ingredientes son mucho más suaves que productos comerciales agresivos y no dañan la tela. De esta manera, puedes devolverle la frescura a tus toallas y alargar su vida útil sin tener que gastar en nuevas.
ALTERNATIVAS Y CONSEJOS ADICIONALES
Si este truco no te funciona a la primera o si las toallas tienen un olor particularmente fuerte, puedes repetir el proceso. También es recomendable asegurarse de no sobrecargar la lavadora, ya que las toallas necesitan espacio para moverse libremente y lograr una limpieza efectiva.
Además, si prefieres un aroma más fresco en tus toallas, puedes añadir unas gotas de tu aceite esencial favorito junto con el vinagre en el primer ciclo. Esto no solo le dará un buen olor a las toallas, sino que también ayudará a mantenerlas frescas por más tiempo.
