El ejercicio intenso podría reducir la mielina del cerebro y afectar su funcionamiento
El experto recuerda que algunos estudios han señalado que, a nivel cardiovascular, cada episodio de ejercicio de muy alta intensidad podría provocar microdaños en el corazón
EFE | Mallorca, 24 de Marzo de 2025 | 19:25h

El ejercicio intenso, como correr un maratón, podría causar un descenso de una sustancia grasa que recubre las neuronas y facilita su funcionamiento, la mielina, según ha comprobado un estudio realizado por investigadores españoles y publicado este lunes en la revista Nature Metabolism.
EL EJERCICIO Y EL AGOTAMIENTO ENERGÉTICO
El ejercicio físico intenso obliga al cuerpo humano a recurrir a sus reservas energéticas, comenzando por los hidratos de carbono y posteriormente por las grasas cuando los primeros se agotan.
La mielina, que actúa como aislante neuronal, está compuesta principalmente por lípidos. Estudios previos con ratones ya habían indicado que esta sustancia podría actuar también como reserva energética en condiciones metabólicas extremas.
Para comprobar si ocurre lo mismo en humanos, los investigadores realizaron resonancias magnéticas a diez corredores de maratón (ocho hombres y dos mujeres) antes y 48 horas después de completar una carrera de 42 kilómetros.
RECUPERACIÓN DE LA MIELINA
El experimento se repitió dos semanas después de la carrera y nuevamente dos meses después.
Los resultados mostraron que, al cabo de dos semanas, las concentraciones de mielina habían aumentado sustancialmente, pero aún no alcanzaban los niveles previos a la competición. La recuperación total de la mielina se observó dos meses después del maratón.
La reducción de mielina afectó a 12 zonas de la materia blanca del cerebro, relacionadas con la coordinación motora y la integración sensorial y emocional.
Los autores, procedentes de centros de investigación del País Vasco, Andalucía y Cataluña, concluyen que la mielina puede considerarse una fuente de energía cuando otros nutrientes cerebrales se agotan durante el ejercicio físico intenso.
LIMITACIONES DEL ESTUDIO
El estudio, sin embargo, presenta algunas limitaciones, ya que el tamaño de la muestra es pequeño y es necesario realizar más pruebas en un grupo mayor. Además, se requiere más investigación para evaluar si estos cambios en la mielina afectan las funciones neurofisiológicas y cognitivas de esas regiones cerebrales.
CONSECUENCIAS DESCONOCIDAS DEL EJERCICIO EXTREMO
Eduard Guasch, electrofisiólogo cardíaco en el Hospital Clínic de Barcelona, advierte que aunque la evidencia sobre los beneficios del ejercicio moderado es muy sólida, las consecuencias del ejercicio extremo aún no están completamente claras.
Guasch explica que el ejercicio extremo genera una sobrecarga y un estrés hemodinámico y energético mucho mayor y prolongado, lo que puede desencadenar incluso un periodo proinflamatorio transitorio tras la actividad física.
En el caso de este estudio, considera fundamental determinar si la reducción de mielina tiene un impacto clínico a corto y largo plazo. Además, sugiere analizar las posibles consecuencias en atletas que compiten en varias maratones anuales, ya que podrían no recuperar completamente los niveles de mielina entre cada competición.
El experto recuerda que algunos estudios han señalado que, a nivel cardiovascular, cada episodio de ejercicio de muy alta intensidad podría provocar microdaños en el corazón, cuya acumulación con los años podría favorecer el desarrollo de arritmias en ciertos atletas.