¿Hasta qué edad se puede solicitar una hipoteca? Los límites que imponen los bancos
El proceso implica consideraciones que van más allá del simple compromiso de endeudamiento
Alicia Romero | Mallorca, 23 de Marzo de 2025 | 18:40h

Solicitar una hipoteca para financiar la compra de una vivienda es una práctica común, especialmente entre los jóvenes. Sin embargo, este proceso implica consideraciones que van más allá del simple compromiso de endeudamiento, ya que los bancos evalúan factores como la edad de los solicitantes y establecen límites en la obtención de financiamiento.
FACTORES Y CONSIDERACIONES PREVIAS
Pedir una hipoteca no es solo cuestión de asumir un préstamo; los bancos buscan garantizar la recuperación del dinero prestado, más los intereses, lo que convierte en real la idea de que "la banca siempre gana". Por ello, surge la interrogante: ¿qué ocurre si tienes 55 años y deseas firmar una hipoteca a 25 años? En ese caso, al finalizar el préstamo, habrías alcanzado los 80 años, lo que, en el mejor escenario, implicaría disfrutar de la jubilación, y en el peor, enfrentarte a posibles problemas de salud. Lo que muchos consideran un derecho, se ve restringido por el criterio de la edad, a menos que se cuente con recursos sustanciales.
CÁLCULO DEL PLAZO Y LA EDAD
Una práctica común en la concesión de préstamos hipotecarios es sumar la edad del solicitante al plazo del préstamo, estableciendo que el resultado no debe superar los 75 años. Esto significa que, si tienes 50 años, dispondrías de 25 años para pagar la hipoteca; mientras que, si tienes 65, únicamente tendrías 10 años para saldarla.
Aunque cada entidad bancaria aplica sus propios criterios y no existe una norma legal general al respecto, la prioridad de los bancos es asegurar el reembolso del dinero prestado. Por ello, los expertos recomiendan consultar varias entidades para identificar cuál ofrece las condiciones más favorables según tu situación particular.
ALTERNATIVAS DE FINANCIACIÓN
Si la edad se convierte en un obstáculo, existe la opción de extender el período de financiación, incluyendo a una segunda persona como titular, preferiblemente más joven. De este modo, en caso de que no puedas cumplir con el pago, esa persona asumiría la responsabilidad. Además, para reforzar la garantía de devolución, el banco podría exigir la contratación de un seguro de vida. Otra alternativa es la hipoteca inversa, dirigida a personas mayores de 65 años, que permite obtener liquidez a partir del valor de la vivienda sin necesidad de venderla ni abandonar su uso.
RECOMENDACIONES Y LÍMITES DEL PRÉSTAMO
El Banco de España recomienda que el plazo máximo para amortizar una hipoteca no supere los 30 años y que la última cuota se pague antes de que el titular cumpla los 75 años. Siguiendo esta sugerencia, se estima que la edad máxima para solicitar una hipoteca por cuenta propia debería situarse en torno a los 45 años.
Es fundamental evaluar cuidadosamente las opciones de financiación disponibles y considerar factores como la edad, el plazo del préstamo y las alternativas existentes para tomar decisiones informadas que se ajusten a las necesidades y posibilidades de cada persona.