Un conductor ebrio choca contra el guardarraíl de Pelaires, en Palma, a lo largo de cinco metros
El hombre, neerlandés de 33 años, se negó a someterse a la prueba de alcoholemia
Marina J. Ramos | Mallorca, 24 de Noviembre de 2024 | 10:18h

La Policía Local de Palma investiga un accidente ocurrido este lunes, 18 de noviembre, en la avenida Gabriel Roca, en el que el conductor, un neerlandés de 33 años, en evidente estado ebrio, chocó contra el guardarraíl de la curva de Pelaires a lo largo de cinco metros.
Los hechos se produjeron a las 22:15h, cuando una dotación de la Policía Nacional vio cómo el coche circulaba anormalmente despacio, sacando humo por el capó. El vehículo tenía todo su lateral derecho golpeado y el conductor actuaba de forma extraña, evidenciando estar ebrio. Ante ello, los agentes solicitaron la presencia de la Policía Local.
Estos instaron al conductor a someterse a la prueba de alcoholemia, pero el hombre se negó a colaborar con los agentes de forma reiterada, impidieron la realización del test al interrumpirlo contantemente.
Ante esta situación, los policías le informaron de las consecuencias legales que acarreaba su actitud. Sin embargo, pese a las advertencias, este continuó con su negativa, por lo que se procedió a notificarle que quedaba investigado no detenido por un presunto delito contra la seguridad vial por conducir bajo los efectos del alcohol y negándose a someterse a las pruebas de detección, además de estar implicado en un accidente.
Y es que según pudieron evidenciar los policías mediante la simple inspección ocular, el coche había chocado contra el guardarraíl de la curva de Pelaires, en dirección al centro de Palma, a lo largo nada más y nada menos que de 5 metros, dejando el lateral derecho del todoterreno con numerosos desperfectos.
El vehículo fue inmovilizado y desplazado hasta el depósito municipal de vehículos de Sa Riera. La Policía Local recuerda que esta conducta puede acarrear penas de hasta seis meses de prisión, de hasta doce meses de multa o de hasta noventa días de trabajos en beneficios de la comunidad y, en todo caso, hasta cuatro años deprivación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores.