«Dejan la humanidad de lado»: Enfermeras del Virgen de la Salud acusan de mala praxis a Dirección
Aseguran que desde Son Espases les obligan a juntar pacientes COVID con mayores con pluripatologías
Alicia Romero | Mallorca, 25 de Agosto de 2024 | 13:04h

Las enfermeras del Hospital Virgen de la Salud de Palma se plantan. Aseguran que desde la Dirección Médica de Son Espases les obligan a juntar en las habitaciones a pacientes COVID con otros no contagiados, ancianos con muchas patologías. Critican, además, que «solo se mira la estadística y dejan la humanidad de lado», pues se ordena mantener a pacientes a punto de fallecer en habitaciones compartidas, con la consiguiente falta de privacidad en momentos tan delicados para el enfermo y la familia. Desde Son Espases niegan estos hechos y mantienen que se siguen los protocolos establecidos y supervisados por el Departamento de Medicina Preventiva del hospital.
La tensión es palpable en la segunda planta del hospital, en concreto, en la unidad EC2A, donde acoge en sus 24 camas a pacientes, en su mayoría mayores y con múltiples patologías. Es un ambiente delicado, pues en muchos casos los ingresados acaban pasando aquí sus últimos días, acompañados de sus familiares. A lo dramático del día a día se le suman los conflictos entre parte del equipo sanitario con la Dirección Médica de Son Espases, de quien depende este hospital. Se ha tensado tanto el ambiente que algunas enfermeras han decidido hacer pública en Crónica Balear la «injusticia» que se está viviendo allí.
Según las enfermeras, desde Dirección les obligan a mantener a 20 pacientes en planta (cuentan con un total de 24 plazas), provocando en muchos casos que quienes están viviendo sus últimos momentos compartan habitación con otros pacientes. Una situación incómoda dada la falta de privacidad en estos instantes para el paciente y su familia. «Están dejando a gente que esta sedada con gente en otra habitación, con los familiares viendo cosas que no tienen que ver», subraya una de las denunciantes. «Estamos 24 horas con el paciente y muchas cosas no las vemos bien, pero desde Dirección se están poniendo agresivos hasta con los trabajadores. Si hacemos un cambio que no estaba previsto llegan a gritarnos», añade. Sin embargo, desde Son Espases niegan con rotundidad estas acusaciones. «Por norma general cuando vemos que alguien está ya en sus últimas horas se intenta que las pase en una habitación individual para asegurar su intimidad», declaran fuentes de Son Espases.
«LOS MÉDICOS ABANDONAN SUS PUESTOS DE TRABAJO PARA IRSE A COMER O A HACER SUS COSAS»
Otra de las quejas recurrentes es la falta de médicos en el centro, con personas mayores con pluripatologías, necesitadas de cuidados recurrentes. Si lo establecido es que haya tres médicos de turno, «este verano suele haber uno, dos con suerte», denuncian las enfermeras. Una acusación que desmienten desde Son Espases, asegurando que «siempre hay dos o tres, y nunca ha habido un día sin médicos». Sin embargo, aquí ya no es solo cuestión de Dirección, sino que este grupo de enfermeras acusa a los propios sanitarios de abandono de sus puestos de trabajo: «Muchas veces llamamos y no están o abandonan su trabajo para irse a comer o a hacer sus cosas». Además, critican que un doctor que trabaja también en la privada se dedica a vender batidos probióticos a los pacientes del Virgen de la Salud pese a que ya los suministra la Seguridad Social de forma gratuita. Un paciente reconoció haberle desembolsado 160 euros en estos suplementos.