Piden cerca de 83 años de cárcel para un grupo organizado de tráfico de anabolizantes en Mallorca
El grupo fue desarticulado mediante una operación policial en mayo de 2017
Redacción | Mallorca, 20 de Marzo de 2024 | 18:04h
La Fiscalía pide casi 83 años de cárcel y multas por valor de más de 1,8 millones de euros para 21 personas acusadas de formar un grupo organizado de tráfico de sustancias anabolizantes en Mallorca además de cocaína, marihuana y fármacos diversos.
La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares ha citado este jueves a las 09.45 horas a las partes. Además de las penas de prisión y multa, la Fiscalía plantea inhabilitar a varios de los acusados para el trabajo como entrenador físico o para el comercio con productos alimenticios.
El Ministerio Público asegura que estas personas mantuvieron "una actividad estructurada y estable" distribuyendo preparados que contenían anabolizantes, utilizando para ello los establecimientos de dos de los acusados --uno de ellos un gimnasio en Palma--. Uno de los titulares de los negocios ya había sido condenado con anterioridad por tráfico de drogas.
El fiscal cree que los cabecillas habrían contado con la colaboración de trabajadores y sus parejas sentimentales. La acusación detalla en su escrito que, dentro de labores de entrenamiento personal, los miembros de la red asesoraban a los consumidores sobre la ingesta de las sustancias y solucionaban por teléfono los problemas que pudieran ocasionar.
Parte de las sustancias fueron traídas desde Tailandia --fundamentalmente kamagra, un fármaco que se utiliza para la disfunción eréctil--. Asimismo, presuntamente también traficaban con marihuana a través de una red estable de suministro.
Asimismo, según la Fiscalía, uno de los acusados, como entrenador personal del gimnasio citado, llegó a estructurar su propia red de negocio en paralelo. Para ello habría contado con una rama alternativa de suministro de cannabis.
El grupo fue desarticulado mediante una operación policial en mayo de 2017. En múltiples registros en Palma y Calvià los investigadores intervinieron una gran variedad de sustancias, entre medicamentos, esteroides, marihuana --se desmanteló una plantación de 256 plantas--, cocaína y hachís.
