La Guardia Civil te puede multar si viajas de copiloto con esta peligrosa postura
Redacción | Mallorca, 03 de Octubre de 2023 | 16:43h

Los viajes largos en coche pueden resultar incómodos tanto para el conductor como para los pasajeros. Mientras que el conductor debe mantener una postura adecuada para controlar el vehículo, acceder a los pedales y estar atento a la carretera, los pasajeros pueden sentirse tentados a tomar ciertas libertades en busca de comodidad en sus asientos.
En este contexto, es común que el copiloto opte por elevar los pies y apoyarlos en el salpicadero para encontrar una posición más cómoda durante el trayecto. Sin embargo, esta práctica no solo es peligrosa para la seguridad del copiloto, sino que también puede resultar en una sanción económica, como ha señalado la Guardia Civil en su cuenta de la red social X (anteriormente Twitter).
La Dirección General de Tráfico (DGT) también ha advertido en su perfil de X que viajar con los pies en el salpicadero disminuye la efectividad del cinturón de seguridad y aumenta la posibilidad de que el pasajero "se deslice por debajo" del mismo, lo que se conoce como el "efecto submarino". Cuando el cinturón no sujeta adecuadamente el cuerpo del pasajero debido a un ajuste deficiente, holgura o mala colocación, el cuerpo se desliza hacia abajo, por debajo de la banda abdominal, lo que incrementa el riesgo de colisión con elementos como el volante, el salpicadero o la parte inferior del habitáculo. La DGT enfatiza que esto puede causar lesiones en la espalda, pelvis, fémur y cabeza del fémur, además de hemorragias internas graves.
Además del "efecto submarino", apoyar los pies en el salpicadero conlleva otro riesgo importante. En caso de un despliegue del airbag debido a un impacto, este puede causar lesiones graves en las piernas y las articulaciones del copiloto. Otros posibles problemas asociados con esta práctica incluyen golpes en las rodillas, daños en la cara, lesiones cerebrales, oculares, fracturas de cadera, pelvis, rodillas y daños en la columna vertebral.
Además de la gravedad de las lesiones, tener los pies en el salpicadero puede resultar en una sanción económica. Esta multa, de acuerdo con el artículo 18 del Reglamento General de Circulación, sería de 100 euros y recaería en el conductor o en el propio copiloto si este último tiene permiso de conducir. No se asociaría a la pérdida de puntos en el carné de conducir.