'Cambia mi look o destrózalo': el concurso que convocó el hombre torturado en Manacor

El joven con discapacidad intelectual, que ha sido víctima de torturas el pasado fin de semana en Manacor, convocó un concurso por redes sociales para lograr "un look más arriesgado" a cambio de dinero.

Fuentes cercanas al caso han confirmado que el concurso conllevaba castigos puntuales a cambio de dinero. Si la víctima, que presenta una discapacidad intelectual del 38%, perdía, se sometía a una serie de castigos. Si él ganaba, no pasaba nada.

Así lo explicaba el joven en varios anuncios en distintas plataformas. En dichas publicaciones, proporcionaba su número para que contactasen con él, o incluso ponía el link de acceso para que los interesados pudieran meterse en un grupo de WhatsApp donde se organizaba el concurso, llamado 'Cambia mi look o destrózalo'.

Según se puede leer en los anuncios publicados, la misión de los concursantes era "hacer looks y destrozos a un chico para que parezca una chica fea". Acto seguido, anunciaba un sistema de premios del concurso: el ganador se llevaba 3.000 euros, el segundo 2.000 y el tercero 1.000 euros. A los demás, supuestos perdedores del reto, se les daría 500 euros.

Asimismo, la publicación especifica que en el reto "no hay nada de sexo ni de violencia extrema" y que se buscan personas "de 18 a 33 años, que les guste el mundo de los tatuajes, piercing y la estética". Uno de los anuncios, publicado el verano pasado en una conocida plataforma, se ha visto más de 19.000 veces hasta la fecha.

De momento, la Policía Nacional ha detenido a siete personas, todas ellas de entre 20 y 30 años, incluida la madre de una de las chicas arrestada. No se descarta que haya más detenciones a lo largo de este martes ya que la investigación continúa abierta.

El joven contactó con los detenidos por Internet, a través de los anuncios que colgó. Éstos se lo llevaron hasta Manacor para retenerlo y realizarle vejaciones en la casa de una de las arrestadas, cuya madre sabía lo que estaba pasando.

Supuestamente le tatuaron penes en la cara, pezones y sujetadores en la espalda, le cosieron los dedos de los pies, le pusieron pegamento en la boca y le arrancaron las cejas. Las pruebas, realizadas a cambio de pagarle a los detenidos, incluyeron también que lo vistieran de mujer y le obligaran a hacer la compra travestido en un supermercado de Manacor.

Tras las vejaciones y torturas, el hombre logró escapar y contactar con una amiga, que fue quien llamó a la Policía Nacional. Una patrulla de agentes lo trasladó al hospital de Manacor, donde fue atendido.

Los jóvenes detenidos por presuntos delitos de detención ilegal, lesiones y vejaciones, pasarán previsiblemente este miércoles a disposición judicial.