Una temporada contra el viento y la marea por parte del voleibol balear

La temporada no ha sido fácil ni para Conectabalear Manacor ni para Voley Palma. Los contratiempos que han sufrido ambos equipos desde el inicio del curso ha supuesto que no pudieran afrontar la temporada con las garantías que tenían planeadas antes de arrancarla.

Aún así, tanto los de la zona de Llevant como los de Ciudad han echado de orgullo por superar los problemas que se han topado durante la campaña y han logrado defender con mucha dignidad su escudo y el voleibol balear.

En cuanto al Conectabalear Manacor, no pudo empezar la temporada con dos jugadores clave que daban un salto cualitativo a la cantera. Los problemas burocráticos penalizaron a un conjunto rojo que tuvo que reinventarse para poder presentar un equipo competitivo e incluso vivió unos primeros meses en los que viajaba con tan sólo ocho jugadores.

Las bajas de Caetano Filter, uno de los jugadores diferenciales del club durante las últimas temporadas, y la del fichaje Luis Vidal en los primeros meses de competición dificultaron un inicio de temporada que fue frustrante por los intereses manacorenses.

Durante el curso, al Conectabalear le ha costado encontrar su mejor nivel, penalizado, como decíamos, por este inicio de temporada convulso, pero aun así ha luchado por entrar en los playoff hasta esta última jornada. Los de Lluís Molada han sufrido un año complicado, pero lleno de aprendizaje que les impulsará la próxima temporada, la sexta de forma consecutiva en la máxima categoría del voleibol nacional.

En cuanto al Voley Palma, perdió a su patrocinador principal y máximo apoyo económico un mes antes de empezar la temporada, lo que dejó la supervivencia del club en el aire. Después de semanas de negociaciones que no tuvieron éxito, el club decidió arriesgarse y salir a competir con un equipo de mínimos. 

El objetivo del Voley Palma pasaba por mantener la categoría porque así sería más fácil conseguir un patrocinador para la próxima temporada. Acabó la primera vuelta con dos victorias y fuera del descenso, pero sufrió la salida de dos pilares de la cantera, Xavier Folguera y Manu Furtado.

Golpe fuerte por un Voley Palma que tuvo que realizar dos incorporaciones inmediatas para mantener un bloque competitivo. El equipo de Ciutat, finalmente, ha terminado la temporada con tres victorias consecutivas, con el objetivo de la permanencia en sus manos y satisfecho por haber superado su peor año de la historia. Ahora, ya mira en la próxima temporada con la esperanza de encontrar un equilibrio económico que le permita soñar con cotas más altas.