"Son Gotleu es el barrio sin ley": El testimonio de una vecina que da cuenta de la degradación de la zona

"Son Gotleu es el barrio sin ley". Así de tajante se muestra una vecina de esta barriada de Palma, quien denuncia la inseguridad que siente en la zona, a la que se suman toda una serie de problemáticas que hacen de la vida allí, asegura, "un completo despropósito". Incide en el incivismo de algunos residentes, que ensucian las calles y protagonizan ruidos constantes que impiden el descanso de los demás vecinos.

La suciedad se acumula en los alrededores del domicilio de esta mujer, quien, harta de la "falta de acción" por parte del Ayuntamiento y de la Policía, ha decidido hacer pública la situación que soportan algunos de los vecinos. Solo hace falta salir de su casa para toparse con escombros en el suelo o amontonados entre contenedores. "Son de los vecinos de enfrente", explica. "Antes era un garaje, pero lo han transformado en un apartamento, haciendo obras sin licencia y sin nada, dejando todo tirado por aquí", dice señalando todo un sendero de muebles, sacos y demás trastos que continúa a lo largo de varias callejuelas.

Estos moradores, en concreto, además de abandonar los escombros, protagonizan largas comidas y cenas en la calle, provocando constantes ruidos que impiden descansar al resto de personas en sus propias casas. "Parece ser que el comedor del apartamento es muy pequeño, por lo que sacan una mesa grande y comen y cenan tocando palmas en mitad de la calle. Han estado así todo el verano, pero pensábamos que en invierno la cosa se relajaría", declara a Crónica Balear. Las esperanzas cayeron en saco roto. Ni siquiera las bajas temperaturas de finales de otoño han impedido las escandalosas celebraciones y comidas.

OKUPAS

A los problemas de convivencia se le suman las 'okupaciones' de viviendas. Una de las últimas de las que ha tenido constancia ha sido la de la azotea de su propio edificio, que ahora se encuentra llena también de escombros y basura. "En el último piso se ha instalado alguien. Al hacer las heces y orinar, toda esa humedad se está traspasando al techo del comedor de la vecina del quinto. Vino el propietario de la casa -de una familia que se fue de la barriada por suerte- y no podía hacer nada porque no hay presidente de la comunidad y la cerradura de la llave de acceso a la azotea está cambiada. La luz la tiene enganchada a la red eléctrica de la comunidad. No sé cómo no hay un cortocircuito", expone, indignada. "No queda nadie de los antiguos propietarios, todos se han ido de aquí", añade.


LA DEGRADACIÓN DEL BARRIO

La denunciante -quien prefiere mantenerse en el anonimato por miedo a posibles represalias- lleva casi toda la vida viviendo en Son Gotleu. Se mudó allí hace más de cuarenta años y, asegura, ha sido testigo de la "degradación del barrio". "Añoro el barrio de antes. Desde los 2000, cuando empezó a venir gente problemática, poco a poco han ido desapareciendo todos los negocios. Había de todo, no te tenías que desplazar a otra barriada para comprar: teníamos hasta dos ferreterías, y así muchas cosas. La gente ahora ya no viene por miedo".

"Siempre ha sido un barrio humilde, pero una cosa es eso y otra lo que está pasando ahora". Percibe que en los últimos veinte años, la inseguridad se ha apoderado de la zona, con peleas, okupas, tráfico de drogas y otras problemáticas. "Aprovechan que la policía no hacen acto de presencia y hacen lo que les da la gana".

"Yo ya no confío en que la Policía ni el Ayuntamiento hagan nada, pero es justo que se sepa la realidad", dice, resignada y alegando la "falta de acciones" y el "abandono" del barrio en las últimas décadas.