Lara Domínguez: “cuando las personas lean el libro probablemente se cuestionen muchas creencias que tenían”

Lara Domínguez es "un alma antigua que ha recorrido muchos caminos". Se lo revelaron en su día unos seres de otra dimensión, que le anunciaron que se reencarnaría para vivir sucesivas vidas —guerrera, sanadora, bruja...—. Ahora es una chamana o "mujer medicina" vinculada con las plantas y la alquimia, que informa de las conexiones entre el mundo espiritual y el terrenal.

‘Las Raíces de Akasya’ es el título de su libro; de su propia vida, pero también la cuna de su conocimiento. Un saber que difunde con maestría a través de su propio testimonio, un testimonio que, tal vez, pudiera ser el de otras muchas personas….

- ¿Cómo surge la idea de escribir las ‘Raíces de Akasya’?

A raíz de una prueba muy fuerte que me puso la vida. La muerte de mi padre, junto a la separación de mi primer marido y la enfermedad de mi madre. Todo ello hizo que me encontrara sola. Además, tenía la responsabilidad de llevar cuatro empresas… y sentí que me rendía. No podía más. Pero de pronto algo me hizo reflexionar y sacar fuerzas para salir adelante. Al final pude con todo, pese a que, finalmente, mi padre falleció.
Estas experiencias me trajeron un aprendizaje que consideré que debía compartir y a partir de ahí, de mi despertar, monté mi propia consulta para ayudar a la gente.

Por otro lado, desde pequeña los libros han sido para mí un apoyo muy fuerte y siempre me ha gustado escribir. Por entonces lo hacía a través de en un diario que tenía, pero de mayor comencé a escribir todos mis sueños y todas las visiones que me venían, incluso describía a la gente que podía ver a través de esas visiones y los mensajes que me traían. Pero lo llevaba muy escondido. 

- ¿Cuál fue ese aprendizaje?

El saber que, si has venido con una misión de vida, para estar en coherencia tienes que desarrollarla. Aprendí realmente quién era yo y, por tanto, lo que tenía que compartir.

- Entonces lo más adecuado tal vez sea primero saber quién es Lara Domínguez…

Soy un alma antigua que ha venido a compartir con otros toda la sabiduría ancestral que llevo de vidas anteriores.

Según la reencarnación, nosotros tenemos un alma que baja, a través de ‘un contrato que firmas’, para llevar a cabo una misión; aprender aquello que tienes que trascender y, además, descubrir y recordar quién eres.
Uno de mis dones es recordar muchas vidas pasadas, de hecho, en el libro señalo algunas. Esto es lo que me ha ayudado a trascender aquí y ahora mi misión de vida y lo que tengo que hacer.

- Pero hay mucha gente que no cree en la reencarnación…

Cierto, pero también hay estudios que la avalan y muchos ejemplos; ¿cómo puede ser que un niño de tres años de repente pueda tocar una melodía en un piano como si fuera un adulto? o ¿por qué hay veces que nos llama la atención una civilización, cierta cultura y no sabemos el motivo?… ¿o por qué nos gusta tanto una tradición y de pronto nos late el corazón tan fuerte solo de pensarlo? Pues porque tienes una memoria ancestral.
Y esto es igual que la regresión, una terapia super valida donde muchas veces los psicólogos la utilizan para indagar en temas que tienes bloqueados de tu pasado. Pienso que es fabulosa cuando das con los terapeutas adecuados. Una regresión te puede llevar a otra vida y descubrir, como es mi caso, que el mayor miedo que tenía era hablar en público, porque una y otra vez a mi me han juzgado por bruja y me han quemado en la hoguera delante de un montón de público.

- ¿Cómo defines ‘Las Raíces de Akasya’?

Como una ayuda para que, una vez que estás despertando, tengas herramientas para que no sufras; para que veas que hay otras personas que están pasando por lo mismo y que se sale de la oscuridad, de pensar que no vales, de querer acabar con todo porque es tal el dolor… que no puedes más con tu vida.
Cuando en la vida se presenta una situación muy grave y estas en ‘esa noche oscura del alma’ y te empiezas a conocer… dices: “pues sí he sido capaz de hacer muchísimas cosas y, es más, he sido capaz de hacerlo yo sola”. Entonces empiezas a darte más valor como persona y a reconocer tu valía. Eres un reflejo y una esperanza para otros.

- Por cierto, ¿por qué este título?

Porque fue canalizado. Esos seres de otra dimensión a los que aludo en el libro me dijeron que ese era mi nombre original desde el principio de todo, Akasya.

- Habrá mucha gente que pueda pensar que todo esto son fantasías…

Precisamente una de las cosas que me llevo a aislarme es eso, que la gente no estaba espiritualmente tan abierta y no me entendía.Pero luego acabas encontrándote con personas que conectan contigo porque se hacen las mismas preguntas que tú, y te das cuenta de que no tienes que convencer a nadie, que las personas que realmente están en esa sintonía contigo se te van a acercar y quién no, se va a ir. Yo reconozco que mi libro será leído por personas despiertas, que están despertando o lo están pasando mal, no lo va a leer otra persona que tenga otro tipo de inquietudes, pero tampoco es lo que pretendo. 

- Por lo tanto, en relación con la espiritualidad, ¿hay falta de fe o falta de conocimiento?

Ambas cosas. Hay muchos estudios científicos que dicen que todo es energía y que una persona con su energía puede cambiar la frecuencia de una habitación y eso no lo ves, pero lo sientes.

- En cuanto al subtítulo: ‘Vida y despertar de una chamana moderna’. ¿Qué es una chamana exactamente?

Una chamana o un chaman es aquella persona que se puede conectar con las tres dimensiones: la del medio que es tiempo presente, la de abajo que es el inframundo y la de arriba que es el mundo espiritual.

Lo que hace el chaman, desde tradiciones antiguas, es que cuando alguien tiene un problema conecta y trae la solución a ese problema al tiempo presente. También conecta con lo que ofrece la naturaleza y, sobre todo, con los animales chamánicos. Los animales son muy importantes porque cada uno trae su medicina, eso quiere decir que cada uno tiene una característica. Por otro lado, los chamanes han estado en contacto con las plantas medicinales y en los poblados traían la sabiduría para otros.

Me defino de esta manera porque ahora ha evolucionado su figura. Antes lo veíamos aislado, alrededor de un fuego, en el campo, que no tenía contacto con el mundo material, pero no tiene por qué ser así. Yo soy empresaria, pero también estoy muy conectada al mundo espiritual e incluso tengo mi consulta para poder ayudar a otros. Hay un equilibrio entre lo terrenal y lo espiritual. Por eso creo muy necesario que toda persona al final tenga ese equilibrio, porque a partir de ese camino es cuando uno empieza a estar en paz.

- ¿Y cómo se consigue ese equilibrio?

A través de mucho trabajo, conociéndote a ti mismo y estudiando quién eres porque muchas personas, cuando les pasan cosas, dicen que la culpa es del exterior y no es así. Para empezar, hay que tachar la palabra culpa, para mí no existe, es responsabilidad. No puedes pensar que la vida es una porquería o decir “mira lo que me hacen”. No te están haciendo nada, te están enseñando simplemente lo que no quieres ver de ti. Y para encontrar la paz en uno mismo es necesario saber quién eres. Estar un tiempo a solas y descubrir qué traumas tienes, cuáles son las heridas de tu infancia, cuáles son tus miedos… Cuando descubres eso comienzas a quitarte las piedras de tu mochila y a caminar más ligera. Así es como vas aprendiendo.

- Cuentas que en tu caso has recorrido muchos caminos, ¿cuáles son?

Los de esas vidas pasadas, los aprendizajes que tuve. Pero luego también son los caminos que me ha tocado recorrer en esta vida. Al principio me enfadaba mucho. No entendía porqué me pasaba todo a mí o porqué las desgracias solo llegaban a mi familia, hasta que entendí que esto era una parte del camino. Ahora que lo he superado tengo herramientas para poder compartirlas con otros que estén pasando por lo mismo.
Para mí, el mundo del crecimiento personal, del autoconocimiento, del despertar de la conciencia, de la salud emocional… junto con lo espiritual, es un todo. No concibo una cosa sin la otra. Las emociones cumplen un lugar muy importante, y luego la fe. Creer en algo más cubre un vacío existencial, y yo vinculo todas esas cosas para sentir la paz interior.

- Da la impresión de que cada vez son más amplias las secciones dedicadas tanto a las temáticas de autoayuda como a las de espiritualidad ¿Acaso es que nos encontramos ahora más perdidos que nunca?

Sí. Nos encontramos super perdidos porque estamos despertando, y despiertas a base de caídas y de volverte a levantar. La gente cada vez necesita más ayuda y se pregunta: “¿a dónde voy?, ¿y porqué estoy sintiendo una intuición muy fuerte y antes no la sentía?, ¿qué me está pasando?”. Las personas buscan cada vez más respuestas, pero depende de la cultura en la que vivas, uno se cuestionará en mayor o menor medida la espiritualidad. Cuando te empiezas a cuestionar, te preguntas cómo puedes sentirte mejor porque es un dolor intenso el despertar. Sientes un vacío tan grande... Es entonces cuando la gente se empieza a formar y comienza a leer más y a informarse.

- ¿Cómo hacer para filtrar y reconocer un buen libro de autoayuda?

Dicen que ‘el maestro aparece cuando el alumno está preparado’ y con los libros pasa igual. Tu atraes a aquello a lo que le pones foco, tanto si es bueno como si es malo. ¿Pero qué determina que un libro sea bueno o no? Pues creo que el hecho de si te ha llegado al corazón o si resuena con lo que te está pasando. Todo el mundo cuenta su verdad, pero no puedes demostrar si algo es absoluto. 

Si alguien cree o no cree en estos temas, es correcto porque entra dentro de la dualidad. Nos movemos en un mundo dual, pero lo que está claro es que no puedes esperar que vayas a gustar a todo el mundo, ni que todo el mundo te entienda o que esté de acuerdo. Esto ha pasado siempre.

- En tu libro también hablas sobre la importancia de los animales. 

Sí. De hecho, está dedicado a mi caballo, mi compañero. Los animales son unos maestros que han venido a enseñarnos muchas cosas desde el amor, porque ellos no tienen ego, son puros. Les doy el lugar que se merecen. Los animales te acompañan y al final son el espejo que van a reflejarte todo aquello que tú no quieres ver en ti.

Ellos son más fuertes que nosotros y, como animales, también vienen a hacer su misión propia, en solitario y en conjunto con el humano. Al animal tendemos a victimizarlo, pero tienen una potencia y una fuerza que no tenemos nosotros. Son los primeros que respetan la naturaleza, cosa que en nuestro caso no hacemos. Ya solo por eso están muy por encima de nosotros.

- ¿Cómo puede ayudar ‘las Raíces de Akasya’ a quienes decidan leerlo?

Cuando las personas lean el libro probablemente se cuestionen muchas creencias que tenían. Trato ciertos problemas, pero desde el amor y desde el perdón para transcender conflictos familiares, por ejemplo, y poder estar en paz.
También puede ayudar a personas que estén despertando y afronten temas que le asuntan o que crean que no pueden hablar con nadie. Verán que hay gente que han pasado por lo mismo y al final, estando en la misma sintonía puedes también estar en paz y compartir.

- Eres empresaria y tienes en Santa Ponça, Mallorca, una consulta holística de la cuál también hablas en tu libro, ¿con qué propósito nace este espacio?

Yo estaba ayudando, pero como si fuera de una forma clandestina, como si estuviera haciendo algo malo por miedo a la exposición… Pensé que porqué todos los conocimientos que había adquirido durante tantos años, todo lo que había estudiado no podía oficialmente aplicarlos para ayudar a las personas desde mi propia consulta. Pero no hay que confundir; yo no diagnostico ni me pongo jamás por encima de un médico, al revés, cuando veo a una persona que necesita ayuda psicológica le digo que yo solo soy un complemento a su psicólogo o a su médico. Pienso que cuando se une la medicina holística con la medicina convencional es una gran potencia para el ser humano.

- ¿Qué otros proyectos tienes en marcha?

Quiero escribir dos libros más y hacer formaciones para que la gente siga despertando, al igual que yo lo hice con otros maestros, y también para que la gente tenga más información.

*** Lara Domínguez estará el sábado 20 de mayo, a partir de las 18,30 horas, en la Librería Agapea, en Palma.

El día 27 de mayo, la cita será en el stand de Grupo Planeta, en la Feria del Libro de Madrid.