Un experto señala que el turismo está detrás de los altos precios de la vivienda en Baleares
"La tensión de los precios ocupa toda la isla"
Redacción | Mallorca, 12 de Abril de 2024 | 14:05h

El director de la Cátedra de Estudios Urbanos de la Universitat de les Illes Balears (UIB), Jesús González, ha apuntado como un "problema real" la relación "tan directa" que existe entre el sector inmobiliario y turístico con respecto a los altos precios que registra la vivienda actualmente en las islas de Ibiza y Mallorca.
Así lo ha expresado este viernes el también profesor de Geografía de la UIB en un encuentro con los medios en Ca n'Oleo previo al seminario 'Acceso a la vivienda en la ciudad turística'.
González ha detallado que en el mercado global de la vivienda también influyen factores locales, como la insularidad, puesto que "la tensión de los precios ocupa toda la isla", mientras que en zonas continentales, como Madrid, ha ejemplificado, "esos mismos precios se reducen en medida de la geografía".
Por su parte, el director de la Cátedra Unesco de Vivienda de la Universitat Rovira i Virgili (URB), Héctor Simón, ha estimado que las deducciones fiscales que ha planteado el Govern para los alquileres a largo plazo tendrán "efectos positivos", puesto que "es mejor incentivar que sancionar" para que la oferta aumente.
No obstante, ha considerado que poner límite a los precios del alquiler en las zonas que se declaren como tensionadas "no tendrá éxito" y, en todo caso, provocará una disminución de la oferta, así como dificultades para su acceso por parte de los colectivos más vulnerables.
En este sentido, ha puesto de manifiesto que "ese aspecto de la ley estatal de Vivienda va a ser un fracaso", como valora que ocurrió en Cataluña en 2020. Apunta también que "no hay soluciones mágicas" para la coyuntura actual.
ALTERNATIVAS Y SOLUCIONES
Entre las opciones para mejorar el panorama actual, Simón ha indicado que deberían aplicarse "medidas estructurales" que incentiven la actividad económica fuera de las grandes urbes con el fin de descongestionarlas, al igual que la diversificación de la tenencia inmobiliaria. Otras opciones serían la construcción de vivienda pública o la reposición de inmuebles vacíos en el mercado.
Para buscar alternativas, la profesora de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), Isabel González, ha puesto el foco en aplicar una visión conjunta al modelo urbano territorial y la política de suelo, es decir, "no tratarlo como una cuestión sectorial" dentro de la agenda pública.
Así, ha hecho hincapié en que "los ayuntamientos tienen instrumentos de planeamiento para incrementar el uso público del suelo" y ha criticado que la vivienda se haya convertido "en un bien de inversión, porque no está pensada para vivir por los ciudadanos".
González ha señalado que la situación de vivienda en España tiene que ver con que, históricamente, "el país ha apostado por un modelo de turismo y construcción", así que la intervención pública debería hacerse "de forma más diversificada, y no solo topando precios".
En cuanto a la colaboración público y privada para la construcción de nueva vivienda habitacional, la experta de la Universidad de Santiago de Compostela, María Piñeira, ha advertido que es necesario un estudio sobre los impactos que se deriven de estas intervenciones. "No podemos hablar de una política de vivienda sin conocer la realidad que hay", ha sentenciado.
CONVIVENCIA ENTRE TURISMO Y VIVIENDA
Acerca del alquiler turístico, el docente de la UIB ha concluido que "hay que hacer lecturas detenidas" y observar "cómo está impactando en una posible o no reducción del precio de la vivienda", aunque ha dicho que "en algunos barrios sí se notó un pequeño control del precio del alquiler".
En este punto, González ha pedido "cuidado" en la petición de medidas como la prohibición de venta de vivienda a los no residentes, ya que "se entiende perfectamente cuando se piensa en inversionistas o especuladores", no obstante, ha matizado que ese grupo poblacional también hace referencia a "un ecuatoriano, un nigeriano", es decir, "personas que vienen aquí a trabajar, ¿no vas a dejar que compren?".
A colación, la profesora de la Universidad de Barcelona, Dolores Sánchez, ha diferenciado los conceptos de gentrificación, referido al fenómeno donde la población con renta más baja es sustituida por otra de nivel adquisitivo mayor, a la "supergentrificación", en la que la clase media es reemplazada por la élite.
En este sentido, ha llamado a "no demonizar ni prohibir" el turismo, pues es "un motor evidente" de la economía, aunque sí ha pedido "ordenar, regular y hacer una gestión eficiente" porque, ha admitido, "en algunos sectores específicos de la ciudad es una actividad voraz o depredadora", refiriéndose a la Ciudad Condal.
CUESTIÓN MEDIOAMBIENTAL
En el horizonte climático, la profesora de Universidad Politécnica de Madrid, Isabel González, ha recordado la paralización económica que hubo durante la pandemia, lo que fue "terrible para aquellas áreas dependientes del turismo".
Por tanto, ha señalado que la crisis climática es una cuestión que la administración pública "no quiere ni ver" con relación a su influencia en la vivienda, dado que supondría "un replanteamiento absoluto del modelo territorial y productivo".
A su lado, Piñeira ha subrayado que es hora de reflexionar sobre la creación de "espacios públicos confortables acordes con el cambio climático" y usar los fondos Next Generation para incluir en cualquier tipo de promoción inmobiliaria conceptos como 'confort habitacional', donde se prime la adecuación del espacio, "porque parece que solo tienen que ser las de un poder adquisitivo medio alto".