Trabajadores del aeropuerto de Palma ante las obras: "No podemos más, esto es insoportable"
Denuncian la peligrosidad de los incidentes que se suceden: desde tuberías rotas a desprendimientos
Marina J. Ramos | 11/01/2025

Los trabajadores de la terminal de facturación del aeropuerto de Palma, dicen, no pueden más ante las obras de remodelación que se extienden por gran parte de las instalaciones. "Llevamos un mes trabajando entre polvo, suciedades, ruidos, aguas fecales procedentes de tuberías rotas y con desprendimientos de objetos que obligan a cerrar espacios abiertos y provocan accidentes y más de un susto", expone Caty Llorens, empleada de la compañía Ground 2 air y delegada de prevención de la misma.
"No nos merecemos trabajar en estas condiciones. Aena nos tiene abandonados y prefiere rapidez en acabar las obras a hacerlo en dos tandas, primero la zona norte y luego la sur para prevenir todas las incidencias que ahora estamos sufriendo", critica Llorens. Desde principios de diciembre, ante el acercamiento del inicio de la temporada turística de Semana Santa, las labores se han intensificado. Pese a que Aena y la empresa concesionaria firmaron un acuerdo para evitar molestias, comprometiéndose a llevarlas a cabo en horario nocturno y finalizar a las seis de la mañana. Sin embargo, los trabajadores denuncian que esto no se está cumpliendo: "Trabajan cuando les da la gana", entorpeciendo en muchas ocasiones el funcionamiento habitual.
"MÁS DE UN SUSTO"
Además del manto de polvo blanco que cubre los mostradores de facturación cada mañana -y que los propios agentes de tierra han de limpiar, al no dar a basto el equipo de limpieza-, las mayores molestias que aducen los empleados se centran en las incidencias que se van sucediendo: "Nos llevamos más de un susto casi cada semana", expone la delegada de prevención de Ground 2 air.
Sin ir más lejos, la semana pasada la caída de parte del techo en el filtro de seguridad de trabajadores en la zona de facturación obligó a su cierre. Como solución, se habilitaron a los empleados dos de los destinados a los pasajeros. "Y eso que estábamos en plena operación de Fin de año y había bastante tránsito de pasajeros", apunta Llorens.
Días después, este mismo miércoles, sobre las 9:15 horas, reventó una tubería, inundando varias partes de la terminal de Salidas de aguas fecales. El vertido también afectó a la sala de taquillas de los empleados de Groundforce e impidió acceder a las oficinas de la sexta planta durante un día y medio. "Contra Aena hemos topado. Solo nos dicen que ya se pondrán en contacto con nosotros", denuncia Llorens.
"TRABAJAMOS CON EL MIEDO DE QUE OCURRA UNA DESGRACIA"
Es tal el nivel de polvo en el aire que algunos de los agentes de tierra de la zona de facturación trabajan con mascarillas, en especial, aquellos que sufren de alergias o problemas respiratorios. "Limpiamos como podemos, con toallitas húmedas, los dos dedos que se acumulan de polvo, ante, en nuestro caso, pasajeros alemanes en su mayoría. Al menos lo entienden y esperan, a pesar de ser hora punto. Ya da igual por nosotros, pero trabajamos con el miedo de que ocurra una desgracia. Como le pase algo a un pasajero, la noticia dará la vuelta a toda Europa y será una vergüenza para Mallorca", sentencia la delegada en prevención.
AENA: "SOMOS CONSCIENTES"
Preguntados sobre las problemáticas derivadas de las obras por Crónica Balear, desde Aena aseguran: "Somos conscientes de que la situación es complicada". "Intentamos, en la medida de lo posible, que esto no interfiera en el día a día". Consideran que las incidencias que se han producido son "puntuales" y defienden que trabajan "siempre lo más rápido posible para solventarlo".