Nuevo protocolo para evitar el robo de algarrobas en Baleares
Redacción | 29/07/2022
La Conselleria de Agricultura ha actualizado el protocolo de actuación contra los robos de algarroba en explotaciones agrarias y almacenes de empresas de este subsector, de tal modo que a partir de ahora se exigirá, entre otras cuestiones, certificados de titularidad de las fincas o contratos para la mayoría de operaciones de compraventa.
En nota de prensa, el Govern ha recordado que la algarroba es uno de los cultivos que aporta mayor rentabilidad al sector primario de las Islas y ha puesto en valor dicho producto.
"La algarroba en estos últimos años se ha revalorizado enormemente y esto es una gran noticia, porque este valor añadido aumenta la renta agraria y hace posible que el sector primario siga adelante", ha dicho la consellera de Agricultura, Pesca y Alimentación, Mae de la Concha.
Con todo, ha advertido que este aumento del valor viene aparejado, desde hace unos años, a una "oleada de robos y hurtos en numerosas fincas".
Desde que se avisaron los primeros robos en la campaña de 2019, la Conselleria ha mantenido contactos permanentes con la Delegación de Gobierno, el Grupo ROCA de la Guardia Civil y la Federación de Entidades Locales de Baleares (Felib) para articular un mecanismo de coordinación que sea efectivo.
En este sentido, la consellera ha destacado que, desde su puesta en marcha, se ha hecho un seguimiento y se ha constatado la reducción de robos y hurtos.
Por su parte, el director general de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, Fernando Fernández, ha añadido que, "a pesar de parecer muy complicado al principio, el sector ha acabado valorando la repercusión positiva que ha tenido, y es lo que ha animado a la Conselleria a seguir con éste y mejorarlo".
NUEVO PROTOCOLO
En detalle, el protocolo nuevo consta de varios documentos. En primer lugar, un certificado que se expide desde las delegaciones comarcales para cada uno de los titulares de explotaciones que cultivan algarroba, donde aparecen todas las parcelas y que está firmado por la propia delegación y por la persona que recoge la algarroba en nombre del titular.
También se incluye una declaración responsable para todos los propietarios de algarrobos sueltos o de explotaciones de ocio y autoconsumo que no sean profesionales, y el contrato alimentario, que se aplica a partir de una operación de más de 1.000 euros o bien que no se pague al contado, como exige la Ley de la cadena alimentaria.
Desde la Conselleria han reiterado que uno de los objetivos del nuevo protocolo es el cumplimiento de la ley de la cadena alimentaria en la cadena de valor de la algarroba y que las transacciones económicas entre los diversos eslabones y operadores comerciales "queden claras, además de evitar robos y hurtos y controlar la trazabilidad sanitaria, puesto que es un producto que también se dedica a piensos".
Igualmente, Fernández ha recordado que la ley de la cadena alimentaria marca la obligatoriedad de formalizar por escrito los contratos alimentarios.
Entre los requisitos que tienen que cumplir también figura el precio, que tendrá que ser, en todo caso, superior al total de costes asumidos por el productor o coste efectivo de producción.
Este procedimiento busca garantizar el control sobre todas las operaciones de venta que se produzcan durante la campaña entre los productores y cooperativas, almacenadores y empresas compradoras de algarroba.
Por último, desde la Conselleria se ha informado que ya se están haciendo las primeras visitas para comprobar que el protocolo funcione de manera correcta y que, ante cualquier sospecha de robo, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado podrán inspeccionar tanto los almacenes como los locales de cooperativas y pedir los comprobantes de las compras.
Incluso, en el caso del equipo ROCA de la Guardia Civil, podrán pasar datos de aquellos vehículos que transporten la algarroba.