El Mediterráneo requiere vigilancia constante: es un "bidón de gasolina" en plena crisis climática
La persistente anomalía térmica del mar eleva el riesgo de episodios extremos mientras se cuestiona la efectividad de los sistemas de alerta
EFE | 29/11/2024
Un mes después de la trágica DANA que golpeó Valencia, el debate sobre los sistemas de alerta sigue abierto. Mientras tanto, el Mediterráneo, con temperaturas de sus aguas entre 1 y 2 grados por encima de lo normal, se convierte en un "bidón de gasolina" que requiere vigilancia constante.
El meteorólogo Francisco Martín, del servicio Meteored, explica que las aguas del Mediterráneo mantienen valores inusualmente altos pese a la cercanía del invierno. "Es sorprendente que las temperaturas sigan por encima de lo normal", comentó.
TEMPERATURAS ANÓMALAS Y SU IMPACTO
Aunque estas temperaturas anómalas no representan un peligro inmediato, Martín advierte que podrían convertirse en un problema si coinciden con una borrasca o una nueva dana. "La anomalía térmica persiste, y las aguas siguen relativamente cálidas, lo que obliga a estar muy pendientes del tiempo", explicó.
El Mediterráneo, afectado por la crisis climática, almacena energía que podría liberarse con una perturbación como una dana, un frente frío o un flujo de Levante. Según el experto, "es como tener un bidón de gasolina en la puerta de casa; el problema surge si alguien tira una colilla encima". Aunque actualmente no hay previsión de una perturbación inminente, el riesgo existe.
LA DANA DEL 29 DE OCTUBRE EN VALENCIA
La DANA del pasado 29 de octubre en Valencia dejó un impacto devastador. Según el meteorólogo, su peligrosidad se anticipó con días de antelación debido a su ubicación en una zona crítica, el golfo de Cádiz, al norte de Marruecos. Este tipo de DANAS no siempre producen efectos tan dramáticos, pero la intensidad depende de factores como su ubicación y capacidad de interactuar con las aguas cálidas del Mediterráneo. “Muchas DANAS pasan desapercibidas porque no son tan activas ni se colocan en zonas de alto impacto”, afirmó Martín.
EFECTIVIDAD DE LOS SISTEMAS DE ALERTA
Martín destacó la efectividad del sistema de alerta meteorológica temprana en España. Sin embargo, en el caso de Valencia, el problema no fue la herramienta en sí, sino la falta de transmisión adecuada del mensaje: "Las alertas no llegaron a la población porque los responsables no supieron interpretar ni activar el botón de alerta a los móviles", señaló el meteorólogo.
El sistema de alerta basado en el color rojo funciona perfectamente, ya que es un mensaje claro y universal. "Todo el mundo sabe lo que significa un semáforo en rojo o una bandera roja en la playa", añadió. Sin embargo, en el caso de la DANA de Valencia, "algo falló en la cadena de transmisión de la alerta".
VIGILANCIA CONSTANTE SOBRE EL MEDITERRÁNEO
El Mediterráneo sigue siendo una región que requiere atención constante debido a su capacidad de almacenar y liberar energía. Según Martín, las temperaturas actuales de 20 a 22 grados en algunas zonas, aunque lejos de los picos de verano, son inusualmente altas para esta época del año.
La clave insiste el experto, está en la combinación de la crisis climática, las anomalías térmicas y la efectividad de los sistemas de alerta para minimizar riesgos y salvar vidas en futuros episodios extremos.
