Más de 30 trabajadores de una empresa mallorquina denuncian que llevan tres meses sin cobrar

Tres meses sin cobrar. Es la situación a la que hacen frente una treintena de trabajadores de la empresa mallorquina Color85, de pintura y obras. La compañía, que participa en obras de mantenimiento del Hospital de Son Espases o de Acciona, en el aeropuerto de Palma, se declaró en concurso de acreedores en junio y desde entonces ha suspendido los pagos a los empleados. "Algunos de nosotros estamos en una situación crítica. Hay gente que lo está pasando muy mal, que tiene niños o hipotecas que pagar, gastos que no pueden esperar", denuncia Juan Carlos Zapatero, portavoz de los afectados.

Tras declararse en concurso de acreedores, las empresas que contrataban los servicios de Color85, al ser subsidiarias y estar obligadas por ley a pagar la nómina a los obreros en caso de no percibirla, han ido prescindiendo de ellos. Han perdido así la mayoría de obras que estaban realizando. Las contratistas no quieren asumir sus nóminas y su empresa, Color85, directamente no les paga por falta de liquidez. Oficialmente siguen contratados y con la obligación de presentarse cada día en su puesto de trabajo, pero el trabajo como tal...escasea. "Pasamos ocho horas al día sentados en una silla de playa, en un local al lado de la oficina, sin nada que hacer. Si nos vamos es como si dimitieras, pierdes tu antigüedad y tus derechos. No podríamos cobrar lo que nos deben", explica Zapatero, quien recuerda que "hay gente que lleva 24 años en la empresa". Pese a ello, en junio seis trabajadores se vieron obligados a dimitir, al no poder hacer frente a tanto tiempo sin ingresos.

El problema, aseguran los trabajadores, es que la empresa "no quiere reconocer la deuda y no nos deja irnos a trabajar a otro lado". Y recalcan: "Lo que queremos es que se liquide, que se nos aporten las nóminas que nos deben y poder irnos a otro sitio a trabajar", dejando atrás el bucle de tener que presentarse cada día a no hacer nada para ganar a final de mes, de momento, nada. 

Critican además la falta de comunicación con el administrador concursal, quien se ha hecho cargo de la gestión del proceso empresarial: "El 19 de junio la empresa nos citó en una reunión en la oficina, en la que se nos anunció que habían presentado el preconcurso de acreedores. El juez lo aprobó el 25 de julio. Y desde entonces no hemos sabido nada más. Nadie se ha puesto en contacto con nosotros", declara el protavoz de los trabajadores, quienes han acabado recurriendo a la prensa para hacer pública la que consideran una "injusticia".