Los constructores calculan que faltan 35.000 viviendas en Baleares
Denuncian que la inversión en obra pública en Baleares ha caído un 42% en 2023
Redacción | 03/04/2024

La inversión en obra pública en Baleares en 2023 ha caído un 42%, una cifra que según la Asociación de Constructores de Baleares agrava el problema habitacional con un déficit que calculan que es de 35.000 viviendas en el archipiélago.
Así lo ha explicado este miércoles la directora general de la Asociación, Sandra Verger, en la presentación anual de la actividad del sector en 2023 y las previsiones para este año.
Los datos señalan que la inversión en construcción tanto pública como privada ha alcanzado los 2.055 millones de euros, con una disminución del 15,4% respecto a 2022, según han detallado, una bajada que se debe principalmente a la caída de la inversión pública.
Desde la Asociación han apuntado que dicha bajada en la inversión pública se debe a grandes rasgos a que 2023 fue un año electoral y al cambio de Govern. "Esperamos que en 2024 las licitaciones experimenten un repunte porque llevamos un año sin licitaciones", han indicado.
Igualmente, la inversión privada en 2023 ha disminuido un 2,1% aunque con un comportamiento diferente por islas. En Mallorca ha subido un 0,9%, mientras que en Menorca ha bajado un 23%. Por su parte, en Ibiza y Formentera la inversión privada ha disminuido un 3%.
Verger ha subrayado que, en cuanto a la vivienda, en las Islas hace 14 años que no se superan las 4.000 viviendas al año. De este modo, en 2023 los proyectos visados de vivienda han sido 3.292, que representan una bajada del 7,5% en relación con el año anterior. Por tipología, las viviendas plurifamiliares se han reducido un 9,9% y las unifamiliares han crecido un 1,8%.
La directora general ha advertido que "lo ideal" sería que se construyeran una media de 7.000 viviendas cada año. "Se incrementa cada año el déficit de vivienda", ha puntualizado.
Por islas, en Mallorca los proyectos de vivienda han bajado un 4,7% --con 2.332 proyectos visados--, en Ibiza y Formentera se han reducido un 3% --798 proyectos-- y en Menorca un 36,8% menos --182 proyectos--. En esta línea, ha destacado que en esta isla la vivienda plurifamiliar se ha desplomado un 54,9%.
Estas cifras reflejan, según la Asociación de Constructores, que se está construyendo "muy poca" vivienda y que la que se construye no es "asequible".
Teniendo en cuenta la inversión total que se ha hecho en la construcción de vivienda en 2023 en el archipiélago balear y el número de viviendas visadas, el coste medio por construcción se ha situado en 380.000 euros, sin contar el suelo e impuestos.
LAS VPO CAEN UN 50% Y LA INVERSIÓN TURÍSTICA UN 23%
En relación con la Vivienda de Protección Oficial (VPO), la Asociación ha explicado que este tipo de vivienda se ha reducido en 2023 en un 50%, con un total de 47, todas en Mallorca. En esta línea, Verges ha incidido en que el Instituto Balear de la Vivienda (Ibavi) tiene que recuperar "los ritmos de los últimos años" y potenciar las VPO.
"Es imprescindible que el Govern aumente la construcción de vivienda social y la colaboración público privada para propiciar unas condiciones óptimas para la construcción de VPO por parte del sector privado", ha considerado la presidenta de la Asociación, Fanny Alba.
La inversión turística, por otro lado, ha bajado de forma "significativa" con un descenso del 23,4%. En Mallorca ha sido del 17,3%, en Menorca del 1,6% y en las Pitiusas del 44%.
BALEARES, SEGUNDA CCAA CON MAYOR DESCENSO EN LICITACIONES
Desde la Asociación de Constructores han advertido que Baleares ha sido en 2023 la segunda comunidad autónoma con el mayor descenso en el conjunto de las licitaciones de todas las administraciones. Se ha situado en los 4468 millones de euros, un 42% menos que en 2022.
Sobre esta cuestión, Verges ha insistido en que se ha producido una "cascada" de licitaciones desiertas, una tendencia que es "imprescindible corregir", por ejemplo ajustando los presupuestos de las licitaciones al precio de mercado.
Esta cuestión, según han detallado, sumada a la "negativa" de las administraciones, principalmente ayuntamientos, a tramitar las solicitudes de revisión de precios, "ponen en peligro" la ejecución de obras con fondos europeos.
Por su parte, la presidenta de la Asociación ha destacado que las cifras de 2023 confirman que "nunca se ha construido tan poca vivienda --a excepción de la crisis inmobiliaria-- en las Islas".
En cuanto a las previsiones para 2024, Alba ha apuntado que la actividad "estará marcada por una pequeña tendencia a la baja". Sin embargo, ha incidido en que habrá que esperar a conocer el alcance del Decreto Ley de medidas urgentes en materia de vivienda del Govern.
La Asociación ha contabilizado el déficit actual de la vivienda en 35.000 unidades y ha señalado que, atendiendo a los datos del incremento poblacional, en los próximos 13 años se "deberían poner en el mercado para alquiler y venta 10.300 viviendas anuales para equilibrar demanda y oferta".
En esta línea, ha lamentado que la mayoría de ayuntamientos de las Islas "no están aprovechando" las medidas que propone el Decreto Ley de vivienda. Desde el punto de vista fiscal, los constructores proponen implantar bonificaciones del ITP y el IBI por la compra de la vivienda habitual, así como desgravaciones a los propietarios que pongan vivienda en alquiler a precios asequibles. Además, han insistido en la necesidad de aumentar la seguridad jurídica de los propietarios.
FALTA DE MANO DE OBRA EN EL SECTOR
Por otra parte, han subrayado que persiste la falta de mano de obra cualificada y sin cualificar en el sector de la construcción, en el que calculan que faltan unos 7.000 trabajadores.
El vicepresidente de la Asociación Climent Olives ha señalado que "la previsión para encontrar mano de obra es complicada" y ha explicado que a nivel nacional se está estudiando una fórmula de acuerdos con otros países para traer trabajadores temporales.
No obstante, Olives ha advertido que esta fórmula es "complicada" puesto que no hay vivienda en el archipiélago. Por ello, desde la Asociación han apelado a una colaboración directa con el Servicio de Ocupación de Baleares (SOIB) para incorporar al mercado laboral a las 3.600 personas desempleadas que calculan que hay actualmente en el sector de la construcción.