Desesperación y largas colas para hacerse el test de antígenos en Son Dureta
Esther Ballesteros | 09/01/2022
La desesperación es palpable a las afueras del antiguo hospital de Son Dureta y la impaciencia se refleja en los rostros. "Llevamos casi dos horas en la cola y aquí seguimos", se escucha con frecuencia. Es el testimonio de algunas de los centenares de personas que en la tarde de este domingo se agolpan en los alrededores de las instalaciones, donde tienen cita para someterse a un test de antígenos.
La larga cola, que apenas avanza unos pasos cada, llega hasta la rotonda del Camí de Génova. Cada vez llega más gente y cada uno de los recién llegados formula la misma pregunta: "¿Esta es la cola para la prueba?". Es la escena de un domingo a las cuatro de la tarde en el perímetro de Son Dureta, donde este fin de semana continúan llevándose a cabo pruebas de antígenos desde que el pasado jueves BitCita comenzase a dar cita a quienes presentasen síntomas compatibles con el coronavirus.
Si las colas ya eran interminables entre semana, estas se han recrudecido durante el sábado y el domingo. "No sé para qué te hacen pedir cita si luego hay que hacer cola. Mírala, bordea Son Dureta y llega hasta el fondo", subraya a Crónica Balear Marcos, uno de los tantos ciudadanos armados de paciencia a la espera de su ansiada prueba diagnóstica.
Otra de las personas que aguarda a las afueras del antiguo centro hospitalario asegura haber caminado "más de cinco minutos desde que aparqué el coche, al inicio de la fila, hasta llegar al final. Somos cientos de personas", estima, visiblemente exasperada.
En la cola también hay familias con hijos, que amenizan como pueden la espera de los niños. El padre de tres menores afirma que tenía cita a las 15.50 horas, pero ya son más de las 16.30 horas. "Ya queda menos. ¿Veis aquel edificio? Pues allí es", les anima. Uno de los pequeños, que no pierde el sentido del humor, le responde: "¡Pero si la cola llega hasta el final de España!".
Mientras tanto, su progenitor les ofrece "agua y galletas de dinosaurios". Aún están a más de un centenar de metros del punto de detección pero cualquier distracción es poca para hacer que el tiempo transcurra más deprisa.
"Esto es una tortura", proclama otra mujer, quien, dirigiéndose a quienes la preceden, enumera la lista de quehaceres que había dejado pendientes hasta su regreso de Son Dureta. "Había escuchado que se juntaba mucha gente, pero no imaginaba este colapso. Hemos dado cuatro pasos y ya. Ahora ni nos movemos", se lamenta.
A las puertas del punto de detección, antigua sede del centro de emergencias del 061, los ciudadanos se ven más animados: ya no les queda nada para someterse al test de antígenos y poder volver a casa. Aquellos a quienes ya se les ha efectuado la prueba salen por una puerta próxima y comentan la 'aventura' de la espera: "Hemos guardado cola durante más de hora y media pero nos lo hemos tomado con filosofía. De nada sirve cabrearse". Señalan que dentro de la instalación hay seis cabinas para el test, pero "el problema es que hay mucha gente".
Durante estos días se ha priorizado a las personas vulnerables (más de 70 años, embarazadas y profesionales sanitarios y sociosanitarios) y a quienes conviven con una persona diagnosticada de COVID-19 a la hora de realizar la prueba diagnóstica. Estas personas deben pedir cita para hacerse la prueba diagnóstica entre el tercer y el quinto día después de la fecha del último contacto con la persona que haya dado positivo.
Asimismo, las personas asintomáticas que hayan sido contacto estrecho, que estén vacunadas con pauta completa y que no formen parte de estos grupos no tendrán que hacer cuarentena pero tendrán que extremar las precauciones durante el período de 10 días después del último contacto con el caso confirmado, limitando las actividades a las esenciales, reduciendo lo máximo posible las interacciones sociales y cumpliendo con rigor las medidas de prevención de los contagios (distancia de seguridad, higiene de manos, uso de mascarilla y ventilación de los espacios cerrados). Además, tendrán que vigilar con atención el desarrollo de síntomas compatibles con la enfermedad.
Son las recomendaciones de la Conselleria de Salud y Consumo, que señala, asimismo, que las llamadas a InfoCOVID -la plataforma creada por la Fundación BIT y el Servicio de Salud de las Islas Baleares en abril del pasado año- se hayan multiplicado y hayan superado las 20.000 diarias.
Ya no es necesario, por tanto, llamar a InfoCOVID, línea telefónica que continuará ofreciendo servicio para la resolución de dudas y para otras funciones específicas. De esta forma, se agilizará el sistema para solicitar una prueba diagnóstica por parte de los usuarios, como ya se hace desde la semana pasada con la gestión de los contactos estrechos.
Ambas acciones, la solicitud de prueba diagnóstica y la gestión de contactos estrechos, se realizarán mediante el recurso online www.ibsalut.es/autorastreigcovid, que da acceso a BitCita.