Armengol afirma que el nuevo Son Dureta "pondrá al paciente en el centro de las políticas sanitarias"
Redacción | Mallorca, 01 de Abril de 2023 | 13:15h

Las obras de demolición de las construcciones de la parcela que albergará el Edificio A del nuevo Son Dureta han comenzado este sábado.
Ha asistido la presidenta del Govern, Francina Armengol, acompañada de la consejera de Salud y Consumo, Patricia Gómez. Allí, Armengol ha explicado que "Son Dureta fue el hospital de referencia y toda la ciudadanía tiene recuerdos, también de la magnífica atención del personal que trabajaba".
Ahora, con el nuevo proyecto, Son Dureta será una pieza clave de la estrategia de atención a la cronicidad, puesto que, en palabras de la presidenta, "nos hemos adaptado a la realidad: tendremos una población más envejecida que necesita una atención distinta por parte del sistema de Salud".
Francina Armengol ha recordado que el nuevo Son Dureta contará también con una residencia que ya se está construyendo y que tendrá 120 plazas y ha reivindicado que el Govern "cumple con la palabra dada. Empezamos en 2015 a trabajar para hacer de la salud y la atención a las personas nuestra prioridad y hemos puesto a los pacientes en el centro de nuestras políticas sanitarias".
El proyecto de ejecución del complejo sociosanitario Nou Son Dureta prevé la construcción de dos edificios (con tres módulos cada uno), que acogerán los hospitales de media estancia (Área A) y de larga estancia (Área B).
La superficie total del complejo sociosanitario es de 82.822 m2, de los que 67.362 m2 se destinan a superficie hospitalaria y 15.460 m2 a aparcamientos (con 542 plazas). Las zonas ajardinadas tendrán una superficie de 48.793 m2. El presupuesto global del proyecto asciende a 178,4 millones de euros.
Las obras que comienzan hoy han sido adjudicadas a la UTE formada por Melchor Mascaró SAU y Excavaciones y Demoliciones Medina SL, por importe de 3,5 millones de euros, y tienen una previsión de ejecución de catorce meses.
El objeto de las obras consiste en la demolición de las edificaciones de la zona llamada Edificio A. El contrato también incluye otros servicios como la descontaminación de materiales peligrosos, la desconexión de redes de servicios, la limpieza y acondicionamiento de la parcela la cimentación, etc.
Para llevar a cabo el proyecto de demolición deben tenerse en cuenta diferentes factores como el estado de conservación de las construcciones, las ampliaciones o reformas, las diferentes alturas de los edificios, la presencia de materiales peligrosos, etc. elegir el procedimiento y la aplicación de técnicas más avanzadas de demolición y descontaminación para la posterior gestión de residuos.
La UTE responsable de la demolición es la misma que ganó el concurso de las obras de demolición del Edificio B, que se inició en abril de 2019 y finalizó en noviembre de 2020. Así, utilizará los mismos equipos y medios materiales y humanos que utilizó para la demolición del Edificio B (retroexcavadoras, robots de demolición, camiones, semirremolques, etc.).
Para reducir las molestias a los vecinos y a la circulación de vehículos, se colocará un cierre de dos metros de altura en todo el perímetro de la obra y se instalará un andamio para la separación de la obra y la zona de Andrea Doria (en la zona del pabellón D), a fin de mejorar la seguridad y disminuir la afectación de posibles ruidos y polvo a los vecinos y vehículos que circulen.
En el caso de los trabajos relacionados con materiales peligrosos (como el amianto), éstos se adecuarán a la normativa existente en materia de salud y seguridad laboral.
Desde el inicio de los trabajos previos, se dispondrá de un equipo de trabajo especializado y coordinado con empresas especializadas de descontaminación de todos los recursos peligrosos, al igual que se hizo en la demolición del Edificio B. También se instalarán marquesinas destinadas a los residuos peligrosos para su correcta separación según su naturaleza.
El proyecto del nuevo Son Dureta es uno de los más ambiciosos de la Estrategia de Cronicidad de la comunidad autónoma, dado que supone recuperar un espacio emblemático de Palma, donde hasta el año 2010 se ubicaba el hospital de referencia de la nuestra comunidad, y destinarlo a un uso sanitario y social. Además pretende convertirse en un espacio de atención integral y de calidad para pacientes con enfermedades crónicas y para sus cuidadores.