Caos en un ferry de Valencia a Palma: "Algunos pasajeros tuvieron que dormir en la cubierta"

Los pasajeros de un ferry que zarpó ayer de Valencia con destino a Palma vivieron un auténtico “caos”.

“Algunos pasajeros tuvieron que dormir en la cubierta del barco. Nos llevaron como ganado”, critica una de las afectadas.

Según indica esta pasajera a Crónica Balear, cuando anoche llegaron al puerto de Valencia para coger el barco de Trasmed (grupo Grimaldi Lines), desde la compañía indicaron a todos los pasajeros que tenían que irse al de Grandi Navi Veloci (GNV), ya que el ferry del grupo Grimaldi con el que iban a salir de Valencia sufrió ayer por la tarde un incendio.

“La sorpresa fue al llegar al de GNV y ver que ya estaba lleno de personas. Y es que juntaron todo nuestro pasaje con el que ya había en el de GNV. Fue un absoluto caos”, lamenta.

Asimismo, detalla que cuando fueron a pedir el camarote que ellos habían comprado con Trasmed, les indicaron que no había disponibles y que se tenían que sentar en una silla: “No nos podíamos sentar ni en una butaca. Además, los vehículos los tuvieron que meter con calzador”.

En un principio, el barco de GNV zarpaba a la misma hora que el de Transmed, a las 22.30 horas, pero finalmente salió a las 01.30 horas de la madrugada.

“No era seguro viajar así, por lo que muchos llamamos al 112 y al poco rato llegó la Guardia Civil y la Policía Portuaria, pero no hicieron nada. Tendrían que haber pedido la lista de pasajeros, de vehículos, comprobar el aforo del barco... Me da igual si tenemos que dormir en una silla o en el suelo, pero el viaje no era seguro. Todavía estamos en pandemia”, denuncia la pasajera.

Además, ayer era 1 de agosto, día en el que miles de personas inician o regresan de sus vacaciones y, al juntar dos barcos, el descontrol fue total. “No había ni jaulas suficientes para los perros”, indica.

La pasajera lamenta que no pudieron quejarse ante Trasmed porque en la estación marítima de Valencia les indicaron que se tenían que ir al barco de GNV, que salía a la misma hora, pero una vez dentro descubrieron que había otro pasaje.

“Los de Trasmed se lavaron las manos y no pudimos reclamar”, critica.

Por último, la afectada indica que escuchó a tripulantes de GNV decir que no entendían cómo podían ir así.

“En la bodega, en lugar de tres filas de coches hicieron cinco. Era imposible mover el vehículo. No viajamos seguros y la Guardia Civil de Valencia no hizo nada. Fue una situación horrible”, concluye.