La reacción de Sandra Gago cuando le preguntan por Alba Carrillo

Volcada en su faceta de mamá del pequeño Darío, que el próximo mes de enero cumplirá un año, y más enamorada que nunca de Feliciano López, a quien intenta acompañar en los diferentes torneos en los que participa siempre que sus compromisos profesionales se lo permiten, Sandra Gago ha dejado por unas horas a sus chicos para asistir a la entrega de los Premios GQ a los Hombres del año.

Espectacular con un elegante diseño negro sin estridencias, la modelo posó con la mejor de sus sonrisas y, en una noche en la que ellos eran los protagonistas, desveló que los dos hombres de su vida son, como no podía ser de otra manera, Feliciano y su hijo Darío: "son mi vida, los mejores del mundo", ha asegurado sin evitar que se le caiga la baba cuando habla de su bebé que, aunque al principio era "idéntico" al tenista, ahora "tiene mezcla. Menos mal".

Sin planes de ampliar la familia por el momento aunque "en un futuro sí" porque "Darío es muy pequeño todavía", Sandra está retomando poco a poco su profesión con proyectos que todavía no puede desvelar, después de pasar el último año volcada en su hijo e intentando separarse lo imprescindible de su marido.

Un modo de vida 'nómada' que también tiene Ana Boyer, con quien tiene una gran amistad y a quien ha dedicado unas bonitas palabras: "es una grandísima persona y en el mundo del tenis al final nos conocemos todos, nos encanta hacer piña y cuando viajamos nos encanta hacer planes, conocer las ciudades a las que vamos, es muy divertida". "A veces sufrimos más nosotras que ellos con las derrotas", confiesa.

Sin embargo, cuando le hemos preguntado por Alba Carrillo y el anillo de compromiso con Feliciano del que ha presumido recientemente en los platós, la cara de Sandra cambia y con un "adiós", se despide incómoda.