Descubren cómo actúa la ketamina sobre la depresión

Investigadores del Karolinska Institutet (Suecia) han identificado nuevos mecanismos que explican cómo la ketamina, un anestésico con propiedades antidepresivas, ejerce su efecto, lo que despierta la esperanza de encontrar nuevas opciones de tratamiento para personas con depresión grave.

Según los investigadores, cuyo estudio se ha publicado en 'Molecular Psychiatry', los antidepresivos más recetados afectan a la señalización nerviosa a través de las monoaminas en el cerebro. Sin embargo, estos fármacos pueden tardar mucho tiempo en ayudar, y más del 30 por ciento de los enfermos no experimentan ningún alivio. Por ello, se necesitan nuevos tipos de antidepresivos con una acción más rápida y un efecto más amplio. Precisamente, un avance importante es el anestésico ketamina, registrado desde hace algunos años en forma de spray nasal para el tratamiento de la depresión intratable.

A diferencia de los antidepresivos clásicos, la ketamina afecta a la señalización nerviosa que se produce a través del sistema del glutamato, pero no está claro cómo se produce el efecto antidepresivo. Cuando el medicamento tiene efecto, alivia los síntomas depresivos y los pensamientos suicidas muy rápidamente.

EFECTOS SECUNDARIOS NO DESEADOS

Sin embargo, la ketamina puede causar efectos secundarios no deseados, como alucinaciones y delirios, y puede haber riesgo de abuso, por lo que se necesitan medicamentos alternativos. Por ello, los investigadores quieren entender mejor cómo funciona la ketamina para encontrar sustancias que puedan tener el mismo efecto rápido, pero sin los efectos secundarios.

En un nuevo estudio, los investigadores del Instituto Karolinska han profundizado en los mecanismos moleculares que subyacen a los efectos antidepresivos de la ketamina. Mediante experimentos con células y ratones, los investigadores pudieron demostrar que la ketamina reducía la llamada actividad presináptica y la liberación persistente del neurotransmisor glutamato.

"La liberación elevada de glutamato se ha relacionado con el estrés, la depresión y otros trastornos del estado de ánimo, por lo que la reducción de los niveles de glutamato podría explicar algunos de los efectos de la ketamina", afirma el profesor del Departamento de Neurociencia Clínica del Karolinska Institutet, Per Svenningsson, autor del estudio.

Cuando se transmiten señales nerviosas, la transmisión de una neurona a la siguiente se produce a través de las sinapsis, un pequeño espacio donde se encuentran las dos neuronas. Los investigadores pudieron comprobar que la ketamina estimulaba directamente los receptores AMPA, que se sitúan en la parte postsináptica, es decir, en la parte de la célula nerviosa que recibe las señales, lo que provoca un aumento de la liberación del neurotransmisor adenosina, que inhibe la liberación de glutamato presináptico.

Así, los investigadores pudieron contrarrestar los efectos de la ketamina inhibiendo los receptores presinápticos de adenosina A1. "Esto sugiere que la acción antidepresiva de la ketamina puede estar regulada por un mecanismo de retroalimentación. Es un nuevo conocimiento que puede explicar algunos de los efectos rápidos de la ketamina", afirma Per Svenningsson.

En colaboración con la Universidad Rockefeller, en Nueva York (Estados Unidos) el mismo grupo de investigación también ha informado recientemente sobre el mecanismo de la enfermedad en la depresión. Los resultados, publicados también en la revista 'Molecular Psychiatry', muestran cómo la molécula p11 desempeña un papel importante en la aparición de la depresión al afectar a las células que se encuentran en la superficie de la cavidad cerebral, las células ependimarias y el flujo del líquido cefalorraquídeo.