Cort aprueba un proyecto para mejorar la depuradora del vertedero investigado por contaminación

La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Palma ha aprobado este miércoles un proyecto de ampliación y mejora de la depuradora de lixiviados del vertedero de Son Reus, investigado por parte de un Juzgado de Palma por contaminación de un acuífero.

El regidor de Medio Ambiente y presidente de Emaya, Ramon Perpinyà, ha sostenido que esta actuación no se hace ahora "por ningún motivo" en especial sino que ya estaba planificada desde el inicio de la legislatura, según ha explicado en una rueda de prensa.

Cabe recordar que, en agosto, la titular del Juzgado de Instrucción número 12 de Palma dictó un auto en el que acordaba, como medida cautelar, instar al Govern balear, al Consell de Mallorca, al Ayuntamiento de Palma y demás autoridades competentes a adoptar medidas ante la contaminación del acuífero. La juez ordenaba estudiar e implementar técnicas para evitar que los lixiviados --líquidos que circulan entre los residuos en los vertederos-- lleguen al acuífero o tratarlos para que no supongan una fuente de contaminación.

Las obras suponen una inversión de 1,2 millones y se enmarcan en el plan de gestión ambiental y de mantenimiento del vertedero, clausurado en 2008.

Perpinyà ha reiterado que desde Emaya no comparten las conclusiones del informe del Instituto Geológico y Minero de España que apunta a posible contaminación, y de hecho ha defendido que el de Son Reus "es uno de los vertederos mejor mantenidos del Estado".

El proyecto aprobado este miércoles contempla la renovación del sistema del tratamiento de los lixiviados para evitar contaminación; concretamente se modifica el sistema de depuración y se incrementa su capacidad. La depuración se realizará a partir de ahora por el sistema de ósmosis, más efectivo para eliminar los posibles contaminantes presentes en los lixiviados, según ha indicado el Ayuntamiento.

El consistorio prevé que las obras puedan empezar "en breve". Perpinyà ha insistido en que este tipo de infraestructuras se deben ir revisando y ha subrayado que los lixiviados más importantes se producen al inicio de la actividad, pero, en este caso, se considera un vertedero maduro --daba originalmente servicio a Palma y a partir de los años 90 comenzó a dar servicio a toda la Isla--.

El regidor ha afirmado que han "contestado a la juez" todo lo que les ha reclamado y que se ha proporcionado "toda la información" solicitada.

Igualmente, ha considerado del todo inviable trasladar el vertedero a otro punto. Según Perpinyà, "no hay ningún especialista que trabaje con vertederos clausurados" que proponga una medida como esa. El regidor ha argumentado que "son 4,1 millones de toneladas" de basuras actualmente en "un lugar controlado", y que trasladarlas supondría tener "el mismo problema en otro lugar". "Todos los especialistas dicen que ni está justificado ni tiene sentido hacerlo", ha defendido.

En este sentido, el regidor ha apostillado que quienes planteen esa medida "serán grandes especialistas en Geología" y otras disciplinas "pero en vertederos no".